lunes, 5 de septiembre de 2011

Comunión, Órgano oficial de la Diócesis de Querétaro, 4 de septiembre de 2011 No. 707


Septiembre, Mes de la Biblia
Durante todo el mes de septiembre, la Iglesia celebra el mes de la Biblia. La intención es que durante este mes, en todas las comunidades parroquiales, se desarrollen algunas actividades que permitan acercarnos mejor y conocer más la Palabra de Dios. ¿Por qué celebramos en septiembre el mes de la Biblia? Hay varios motivos: Por un lado, porque un 26 de septiembre de 1569, se terminó de imprimir por vez primera totalmente la Biblia en español; Por otro lado, el 30 de septiembre la Iglesia católica celebra la festividad de San Jerónimo que tradujo la Biblia del griego y hebreo al latín, la llamada Vulgata. Por otra parte, tomamos como marco de referencia la VERBUM DOMINI (73, Animación Bíblica de la Pastoral) la cual exhorta a que en las comunidades cristianas, las parroquias, los movimientos y las comunidades educativas se interesen realmente por el encuentro personal con Cristo a través de su Palabra. »Exhorto, pues, a los Pastores de la Iglesia y a los agentes de pastoral a esforzarse en educar a todos los fieles a gustar el sentido profundo de la Palabra de Dios que se despliega en la liturgia a lo largo del año, mostrando los misterios fundamentales de nuestra fe. El acercamiento apropiado a la Sagrada Escritura depende también de esto». VERBUM DOMINI, 52
 Con motivo de la celebración de SEPTIEMBRE, MES DE LA BIBLIA te invitamos a colaborar con nuestra Iglesia Diocesana en esta iniciativa. Para ello te proponemos una serie de actividades entre las cuales puedes optar por las que mejor se acomoden a tu situación:
- Dedicar un espacio especial a la Biblia. Se trataría de mostrarla o destacarla de manera especial a fin de tenerla más presente y cercana.
- Además, los Padres sinodales sugieren que en las iglesias se destine un lugar de relieve donde se coloque la Sagrada Escritura también fuera de la celebración.» Verbum Domini (68)
- Realizar un taller de iniciación a la biblia para niños / jóvenes / adultos. (Cada cual que lo acomode a sus circunstancias).
- Promover un encuentro de oración bíblica.
- Organizar una Semana Bíblica.
- Organizar una Jornada Bíblica.
- Realizar una Lectura continuada de la Biblia. Te proponemos realizar esta actividad el 30 de septiembre por ser la festividad de San Jerónimo. Para ello, invita a los tuyos a inscribirse en una lista/horaria para hacer una lectura de un evangelio completo o lo que se acomode a tu situación.

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Reliquias del Beato Juan Pablo II
12 de diciembre, Seminario Diocesano de Querétaro

· Las Reliquias consisten en una cápsula de sangre del Beato Juan Pablo II colocada en un relicario en forma de cruz y pegada al pecho del Beato.
· La figura de cera es de tamaño natural y está revestida con los ornamentos pontificios. Realizada por artesanos de Guanajuato, quienes se basaron en la mascarilla mortuoria de Juan Pablo II, para asemejar la figura pontifica durante sus exequias
· La Reliquia de segundo grado que lleva la figura consiste en la banda o fajín papal.
· Viene dentro de una urna, la cual está fabricada de alpaca repujada con incrustaciones de talavera, con agarraderas en los 4 lados. Sus dimensiones son de 2 m. de largo por 1.10 m de ancho y 1.60 de alto. Su peso aproximadamente es de 180 kg.
· La urna lleva una base rodante para su instalación y está protegida con una mica especial y sellada para su propia seguridad. La urna debe permanecer en un lugar que esté protegido del sol.
· El manejo de la urna lo realizarán siempre los operadores contratados para el caso, por la propia seguridad de la reliquia.

La visita y peregrinación por la República Mexicana de las reliquias del «Peregrino de la Paz» es una iniciativa de la Arquidiciocésis de México para «recobrar las esperanzas en Cristo Jesús que camina con nosotros en la construcción de una patria más justa, digna y fraterna».

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La Voz de nuestro señor Obispo...
EL DISCIPULO NUNCA OCUPARA EL LUGAR DE JESUS
No fue fácil para los discípulos seguir a su maestro; tampoco para Pedro que había sido elegido por su maestro para «confirmar a sus hermanos en la fe». Ahora el reto es a seguirlo en los momentos críticos de la prueba., cuando Jesús se dispone a afrontar la experiencia de Jerusalén y entrar en la ciudad «y padecer allí mucho por parte de los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, y que tenía que ser ejecutado y resucitar al tercer día». Humanamente Pedro quiere hacerle un favor al Señor desviándolo del camino y disuadiéndolo de no entrar al camino del calvario.

Para el creyente posiblemente exista también la tentación de minimizar o aun de desaparecer esta pagina del evangelio y llegar a disuadirse, y quizás de disuadir a otros, de tal manera que no hay que «entrar en exageraciones». Sin embargo el pensamiento de Dios es muy diferente; por ello el reclamo severo de Jesus a Pedro: «tu piensas como los hombres, no como Dios».

Pedro en crisis ante el misterio de la muerte y resurrección del Hijo de Dios. El misterio pascual se identifica con la existencia cristiana. El hecho de seguir al Señor incluye el realismo de la cruz. La vida hay que entregarla para poder participar de la resurrección. Hablar del misterio pascual es bonito, pero su realidad llega a ser cruda. El dolor conduce al hombre a la rebelión y es difícil de asimilar. Para Pedro no fue fácil, de tal manera que con el afán de ayudar, obstaculizaba los planes de Dios, de tal modo que quería ocupar el lugar de Jesús, ponerse al frente, decir lo que se tenía que hacer. Olvido que el discípulo debe caminar detrás del maestro, por ello la expresión de Jesús es «Quítate de mi vista, Satanás», es decir ocupa el lugar que te corresponde y no te conviertas en mi adversario. Solo se detecta el lugar que nos corresponde cuando se discierne a la luz del evangelio. Quien decide sin consultar la voluntad de Dios fácilmente toma decisiones que ayudan o convienen a los intereses personales y no los de la comunidad; así, fácilmente se decide en un marco de desesperación y enojo. El Espíritu nos da paz y la Palabra Dios nos ayuda a caminar con serenidad, aun cuando el camino implica la cruz.

El proyecto de Dios es necesario asimilarlo, y ello conlleva la propuesta del Señor: «El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga». El discípulo no puede devaluar la fuerza del evangelio. Hoy como ayer la propuesta de Jesús está vigente.

Por ello, la invitación a la reflexión reposada que nos lleve a asimilar esta página, que no hay que pasar de largo sino asumir el reto del estar con Jesús para realizar la misión que él nos pide, más aun, nos ordena.

El Documento de Aparecida, retomando el reto del evangelio señala con valentía, a quienes nos consideramos discípulos misioneros de Cristo, lo siguiente: «La Iglesia necesita una fuerte conmoción que le impida instalarse en la comodidad, el estancamiento y en la tibieza, al margen del sufrimiento de los pobres del Continente. Necesitamos que cada comunidad cristiana se convierta en un poderoso centro de irradiación de la vida en Cristo. Esperamos un nuevo Pentecostés que nos libre de la fatiga, la desilusión, la acomodación al ambiente; una venida del Espíritu que renueve nuestra alegría y nuestra esperanza. Por eso se volverá imperioso asegurar cálidos espacios de oración comunitaria que alimenten el fuego de un ardor incontenible y hagan posible un atractivo testimonio de unidad «para que el mundo crea» (Jn 17, 21). (DA 362)

+Faustino Armendáriz Jiménez
Obispo de Querétaro


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Comunicado No. 1/2011
Asunto: Orar por las víctimas de Monterrey


A los hermanos Presbíteros,
a los miembros de la Vida Consagrada
y a todos los fieles de la Diócesis de Querétaro:

Ante los recientes y dolorosos acontecimientos ocurridos en la ciudad de Monterrey en los que han perdido la vida más de cincuenta personas inocentes, deseo expresar mi profunda consternación por lo sucedido, consciente de la situación tan difícil que vivimos; me uno al dolor de todas las familias que sufren a causa de este terrible y trágico atentado.

Exhorto especialmente a los sacerdotes para que en los templos y capillas de toda la Diócesis de Querétaro, se ofrezcan intenciones en las Eucaristías del Domingo para pedir al Señor por el eterno descanso de los fallecidos y por la salud de quienes se recuperan de ésta reprobable agresión.

En la Sede Episcopal de Santiago de Querétaro, a los 27 días del mes de agosto de 2011.

+Faustino Armendáriz Jiménez
Obispo de Querétaro


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Los movimientos juveniles en la sociedad y en la Iglesia.
Los movimientos juveniles nuevamente emergen en la vida social en varios países del mundo (el movimiento estudiantil chileno, los indignados de España, etc.) haciendo sentir la fuerza de su presencia para reclamar y exigir los derechos elementales que les niega el sistema económico y político imperante, sistema que margina y excluye, al igual que a otros sectores de la población, haciéndolos vulnerables a prácticas ilícitas y orillándolos a la sobrevivencia, que es «la mínima expresión del instinto de conservación».

Los jóvenes son protagonistas e interlocutores que deben ocupar un espacio privilegiado en las agendas de las políticas gubernamentales y de toda institución, incluyendo desde luego a las iglesias, para discernir conjuntamente el quehacer ante los desafíos del presente. Es urgente generar en los hechos esperanzas de un futuro mejor para todos. El vandalismo que algunos llevan a cabo no descalifica el dinamismo de quienes con una resistencia activa enfrentan los discursos demagógicos y políticas que afectan a los intereses de los pueblos y las demandas educativas y laborales de los jóvenes.

Los movimientos juveniles que están resurgiendo en algunos países mueven a la opinión pública a manifestarse a favor o en contra, pero el hecho queda manifiesto, hay un descontento social, que exige toma de decisiones solidarias y concretas, que den solución a las demandas de los jóvenes. El dinamismo existente entre los grupos de jóvenes no es homogéneo, ya que existen entre ellos características, problemas, y reclamos diversos, de acuerdo a los contextos socioculturales propios, pero que se articulan e interactúan para responder a las amenazas y «horas de riesgo» aprovechando las redes sociales, del que son expertos, con sus formas propias de convocar y manifestarse. La sociedad en general con sus instituciones y sobre todo, a quienes se nos ha confiado la misión de anunciar el Evangelio debemos discernir, animar y apoyar los proyectos de los jóvenes que se esfuerzan y defienden con autenticidad, no sin obstáculos, los derechos y los valores humanos y espirituales de las personas y de las colectividades para promover y propiciar una sociedad justa y solidaria. Es fundamental la credibilidad, la necesidad sentida, que parta de un diagnostico y de una estrategia participativa e incluyente con incidencias claras en la vida política, social, económica, cultural y religiosa que inquieta a los jóvenes para reconstruir el tejido social.

A Iglesia a través del Beato Juan Pablo Segundo, de feliz memoria, dio ejemplo de búsqueda y acercamiento a los jóvenes, convocándolos a los Encuentros Mundiales y proponiendo alternativas desde el Evangelio para ser constructores de esperanza y de una civilización del amor y el Papa Benedicto, en medio de tensiones y reacciones encontradas, su presencia firme y segura no deja de alentar a los jóvenes, como lo hizo en su encuentro que tuvo con ellos en España, en especial a los jóvenes católicos, para exhortarlos a ser «protagonistas de la búsqueda de la verdad y del bien», arraigados en Cristo y en el amor a la Iglesia para edificar la civilización del amor y de la vida, capaz de humanizar.
P. Gabino Tepetate Hernández.

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Misa de inicio de Ciclo Escolar 2011-2012 con la Unión de
Educadores Católicos


El día 22 de Agosto, «Reunidos en torno al Altar de Dios, Él ha querido congregarnos como comunidad educativa que queremos poner a sus pies nuestra labor de educar, pues sabemos que sin Él, los esfuerzos son vanos, pedimos su bendición de manos de nuestro obispo Monseñor Faustino Armendáriz, que como nuestro Pastor, nos acoge en este momento para darnos a El que es la vid verdadera, con el gozo de sabernos acogidos iniciamos la celebración Eucarística», así rezó la monición de entrada en la santa Misa que nuestro señor Obispo Don Faustino Armendáriz Jiménez celebró en el Templo de Santa Rosa de Viterbo para encomendar a Dios el año escolar que inicia en compañía de los miembros de la Unión Mexicana de Educadores Católicos.

El Pbro. José Luis Salinas Ledezma Rector del Templo y Presidente de la Comisión Diocesana de Pastoral Profética y el Pbro. Mauricio Ruíz Reséndiz, Coordinador de la Dimensión de Educación,  recibieron al Pastor Diocesano y junto con sacerdotes religiosos, religiosas y educadores laicos ofrecieron a Dios el trabajo en beneficio de la porción más delicada de la sociedad, la niñez y juventud. Nuestro señor Obispo dijo: «Ponemos en las manos de Dios todos nuestros proyectos, que bendiga todo el itinerario educativo, y los esfuerzos que estamos haciendo de formación y de crecimiento de nuestros niños, de nuestros jóvenes y con todos aquellos que miramos con esperanza nuestra vida social y nuestra vida eclesial. Unamos nuestra plegaria para que quienes como responsables de la educación, continúen con tesón y con fe la responsabilidad que Dios ha puesto en sus manos».
También nuestro Obispo afirmó: «Todos los presentes queremos llevar el mensaje de Cristo a nuestras instituciones y a las aulas». «En todo lo que somos y en todo lo que hacemos, la tarea educativa aparece como algo prioritario, es cierto, enmarcado en la tarea fundamental de la Pastoral Profética, una tarea que tenemos que impulsar de manera intensa a nivel general y particular en cada una de nuestras comunidades, que la pastoral educativa sea una realidad en los espacios parroquiales que por doquier tenemos de estar en contacto con la docencia y con los jóvenes que se forman en las aulas».

Abordó como desafíos los temas del relativismo y la tecnificación, la marginación de lo religioso, la urgencia de la formación integral de la persona humana, la formación permanente de padres y educadores, la responsabilidad educativa de los padres y la subsidiariedad de los maestros. Invitó a todos a asumir la tarea y desafío, conocemos la realidad de una comunidad fragmentada donde los valores se siguen marginando, sembremos valores, que con la luz del Evangelio y la fuerza del testimonio nuestros jóvenes, nuestros niños, nuestros maestros vayan creciendo en la conciencia de que de ninguna manera se puede separar la práctica de una vida con la profesión de una fe, tenemos una grande tarea y miramos con fe signos proféticos cuando los responsables de esta tarea en el marco de la educación católica continúan con una actitud de esperanza realizando el papel de formadores testigos de Cristo.

Nuestro señor Obispo reconoció la labor de impulso a la educación que realiza la Unión Mexicana de Educadores Católicos (UMEC), un movimiento laical que intenta y procura nutrir la fe de todos los que integran esta organización. Unidos buscan cambiar la fisonomía de la sociedad.

Al concluir la Misa, nuestro señor Obispo Don Faustino Armendáriz Jiménez, en la sacristía hizo la oración de bendición y de envío de los misioneros que visitarán a las familias de la comunidad de Santa Rosa de Viterbo.

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Fiesta Patronal de San Roque en la Parroquia de la Resurrección del Señor

El señor Cura de la Parroquia de la Resurrección del Señor Pbro. Bernardo Reséndiz Vizcaya, el Pbro. Mario García Maldonado,  Vicario,  y la comunidad de fieles, recibieron este domingo 21 de agosto a nuestro señor Obispo Don Faustino Armendáriz Jiménez para celebrar la fiesta de San Roque.

Gozosos los fieles acompañaron y caminaron por las calles con nuestro señor Obispo. Las familias salieron de sus casas y negocios para conocer y saludar a su obispo;  niños, ancianos y enfermos le saludaron, y otros fueron saludados por nuestro señor Obispo, que entró en sus casas, les anunció el amor de Dios para con ellos y su familia, les escuchó en sus preocupaciones y a todos bendijo, invitándolos a ir a la parroquia hogar de todos y a participar en la Eucaristía, en la mesa de los hijos de Dios. Al caminar de la festiva procesión se unieron más fieles, que llegando al templo dedicado a San Roque se dispusieron a la celebración de la santa Misa presidida por nuestro señor Obispo.

En la homilía nuestro señor Obispo destacó como San Pablo dice: «Toda la vida del ser humano está orientada a Dios». «Todo lo hacemos para gloria de Dios». Y después agregó: «Al recorrer las calles de esta comunidad, poder saludarles más cercanamente, incluso me han permitido entrar a alguna de sus casas y saludar a algunas familias, al final podemos preguntarnos, ¿por qué caminamos? ¿por qué nos encontramos? Y ¿por qué nos reunimos? Precisamente porque tenemos la convicción que toda nuestra vida como dice san Pablo está orientada a Dios y para darle gloria a Dios, viviendo como familia, como hermanos y teniendo gestos de fraternidad poco a poco vayamos formando y perfilando una familia donde Dios esté presente en el seno de la misma». «Hoy Jesús nos dice: ¿Quién dices que soy yo?, ¿para ti quién es Cristo? «La respuesta legítima que nosotros tendríamos que dar al Señor que no le conocemos por un libro, sino lo hemos experimentado en nuestro corazón y desde allí desde tu experiencia de Jesús en tu familia, en tu persona, en tu corazón, desde allí podemos decirle al Señor, Tú eres el centro de mi vida, y si se lo decimos con sinceridad tendremos que revisar toda nuestra existencia, ¿realmente el Señor es el motivo por el cual vivimos? ¿Y por el cual luchamos para tener un comportamiento que le agrade a Dios? ¿Realmente el Señor es el centro de nuestra existencia? ¿En mis proyectos y en mis decisiones le tomo en cuenta? ¿Realmente Jesús es el centro de mi existencia es el Señor de mi vida, mi Salvador, el Mesías? Hermanos que cada uno de nosotros desde nuestra experiencia de Dios le demos una respuesta a Cristo, si somos capaces de decirle: ‘Señor mío y Dios mío’. Confío totalmente en Ti, en Ti confío mi familia, mi vida, mi trabajo, mis proyectos, si somos capaces de tener una fe total  en Él, creo que estamos muy dispuestos a dar ese giro a nuestra vida de tal modo que puedes decir que estás en conversión, que estás cambiando. El Señor espera de nosotros una respuesta y espera que en lo que hagamos y en lo que decidimos, solamente le demos gloria a Él».

«En las manos del hombre está su salvación y solamente no se salva quien no quiere, solamente se aleja de Dios, el que quiere». En nuestras manos está la salvación cuando tomamos el santo Rosario. La paz está en tus manos, la felicidad está en tus manos. La felicidad está en Dios. «Si todo lo hacemos para gloria de Dios nunca haremos algo que afecte a nuestros hermanos».

Para concluir, nuestro Obispo invitó a la asamblea a compartir lo que hoy reflexionó la comunidad, con los que están en sus casas y no están aquí. Y concluyó invitando a todos a evangelizar con valentía, a tiempo y a destiempo, llevar la Palabra de Dios, el amor de Dios a los alejados o a los que no conocen a Dios. Terminada la Eucaristía, nuestro señor Obispo Don Faustino Armendáriz Jiménez bendijo el pan, signo de la providencia de Dios para con sus hijos, fue distribuido a los fieles por los agentes de pastoral de la comunidad parroquial.

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Alocución al Claustro de Profesores del Seminario Conciliar
Del Excmo. Sr. Dr. D. Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo De Querétaro. Santiago De Querétaro, Qro., 22 De Agosto De 2011


Estimados Padres rectores y superiores de los diferentes seminarios que integran la comunidad estudiantil del Seminario Conciliar de Querétaro y las diferentes casas de formación sacerdotal y de vida consagrada: Pbro. J. Martín Lara Becerril, Rector del Seminario Conciliar de Querétaro, Pbro. Miguel Ángel Peralta Valverde, Rector del Seminario Diocesano de Teotihuacán, Pbro. Gilberto Moya, Rector del Seminario de los Operarios del Reino de Cristo. Superior de la casa de formación «Jesús Maestro» de los Misioneros de de la Sagrada Familia.

Queridos profesores de esta «Alma Mater»:
1. Es una grande dicha poder estar con ustedes en esta mañana, quiero en primer lugar agradecer a cada uno de ustedes, la labor que con generosidad realizan en bien de los futuros pastores del pueblo de Dios. Esta oportunidad en la cual nos encontrarnos, nos permite vislumbrar el curso escolar 2011-2012 de estudios tanto de Filosofía como de Teología en nuestro seminario, el cual busca responder a las exigencias de formación que la Iglesia que peregrina en Querétaro va pidiendo. De manera particular al Pbro. Carlos Hernández, secretario de estudios, quien coordina esta noble y fundamental tarea en la formación sacerdotal y eclesiástica. Estoy seguro que el trabajo que cada uno de ustedes realiza es una pastoral que exige dedicación, esfuerzo, empeño, preparación pero sobretodo amor, pues solo así es posible ser testigos de la Verdad y del bien. Los impulso a continuar de manera incansable hasta que logremos hacer de cada uno de nuestros alumnos «un verdadero y auténtico discípulo y misionero de nuestro Señor Jesucristo», pido al Maestro por excelencia, Jesucristo  les bendiga, fortalezca y recompense su generoso servicio.

2.. Las necesidades con las cuales hoy día esta comunidad estudiantil se confronta, han favorecido en la planeación y proyección del curso escolar, teniendo por acento: «El encuentro con la Palabra de Dios nos humaniza y clarifica nuestra vocación».

3. Hemos participado de la celebración eucarística  en la cual escuchamos al Apóstol Pablo que escribe a los tesalonicenses para motivarles a que continúen siendo modelo de fe, de amor y de esperanza para las demás comunidades, tarea en la cual también cada uno de nosotros hoy  día, se convierte en agente activo en la promoción y extensión del Reino de los cielos.  

4. A ustedes profesores del Seminario, les compete contribuir de manera directa y perenne en la Misión de hacer de cada seminarista un cristiano enamorado de su fe y comprometido con Cristo en la misión de llevar a Jesucristo hasta los últimos rincones de la diócesis. En una área donde es esencial la parte humano-intelectual, pues como dice el Apóstol Pedro (1 Pe 3, 15): «estén siempre dispuestos para dar una respuesta a quien les pida cuentas de su esperanza». 

5. Cuentan los biógrafos de Santo Tomás de Aquino que cuando a él tocaba la responsabilidad de preparar la lección inaugural, su preocupación principal era la de «señalar la misión y poner de relieve la figura del maestro ideal», para ello alguna vez eligió un versículo del Sal 103: «desde tus altas moradas abrevas tus montañas y la tierra se sacia de tu acción fecunda». 

6. Los montes se elevan sobre la tierra y son, en su altura cimera, los que más cerca y directamente reciben los rayos del sol y el frescor de la lluvia fecundante, que ellos a su vez en arroyos transmiten a los terrenos de labor en el valle. Los montes eran también las fortalezas más naturales y seguras contra las incursiones enemigas. Así deben ser los doctores de la Palabra Sagrada:
· Elevados sobre la tierra, no precisamente por desentendidos de los bienes y problemas del mundo, sino por la eminencia de su vida consagrada a una visión más alta y desinteresada de todo ello;
· Iluminados y bien empapados de la verdad divina antes, con más frecuencia y avidez que nadie;
· Y con todo ello fuertes y bien equipados como fortalezas para la defensa de la fe, de la doctrina y de la Iglesia.
· Elevación de vida, lucidez de mente, firmeza en la argumentación define la vida integra  de un programa suficiente para cualquier maestro. Pero aún falta considerar la parte y condición de los alumnos que el maestro ha de conocer y respetar e incluso educar. Como la tierra fecunda las aguas los alumnos deben sentir humildemente de sí mismos para un aprendizaje que sea fecundo y creativo.

7. Finalmente en cuanto al orden debido en la enseñanza y aprendizaje, no olvidar que ni los doctores abarcan toda la sabiduría divina, ni los alumnos captarán todo lo que el maestro sabe. Dios posee la sabiduría por naturaleza; los maestros participan abundantemente; los oyentes han de alcanzar lo suficiente para iniciar su propia ascensión y llegar a ser verdaderos ministros más bien que maestros, como Dios los requiere: limpios de mente y de corazón, inteligentes, ardorosos y obedientes según sus planes.

8. San Agustín dirá de todo verdadero maestro: «El maestro elocuente debe expresarse de tal manera, con tal diligencia en su hablar, que realmente enseñe, deleite y convenza: enseñe a los que todavía no saben deleite a los más propensos al tedio en las aulas y doblegue o convenza a los más reacios o difíciles». (Principium… «hic est liber mandatorum», Opuscula…, v. I, ed. Cit., n, 1119).

9. Más adelante se le ofreció a Tomás ampliar su concepción sobre el magisterio. Dice P. Chenu «El título de maestro abarca toda la actualización de la Palabra de Dios, según el desenvolvimiento de tres operaciones homogéneas: leer (un texto básico), disputar (una cuestión, un problema) y predicar». El maestro no es autor ni dueño de la mente de sus alumnos, ni los amaestra como su amo, ni les infunde las ideas, sino sólo desde fuera les ayuda y sostiene en el trabajo personal de adquirirlas. El maestro humano recibe o participa su función extrínseca pero nobilísima, del consorcio y del propio sometimiento al único supremo Maestro  que tiene su cátedra en el cielo y enseña la verdad internamente. Esa es la razón y la fuente del magisterio, así como la humildad del maestro. (M. D. Chenu, St. Thomas d’Aquín  et la theologie, París, Seuil 1970). 

10. La enseñanza no es un negocio que se oponga a la humildad perfecta o a la pobreza evangélica, sino un ministerio verdadero, una obra de confesión y alabanza divina, un ejercicio de caridad y misericordia. La tarea de enseñar, por tanto, es quizá más apropiada, en igualdad de condiciones a la misión, pues la enseñanza toda debe tener su punto de convergencia en Dios, en su amor y en su misión.

11. La acción docente requiere una madurez intelectual, una claridad de visión de la verdad o de la doctrina, un gusto íntimo en ella, que hacer de él un contemplativo, un clarividente enamorado del  tema de su enseñanza. Especialmente en la Sagrada doctrina. «nadie será más idóneo para enseñar que el maestro que haya llegado a comprender y gustar de los divinos misterios en la contemplación». Sólo en esta etapa de madurez, cuando se llega a una comprensión global, a una penetración intuitiva, sosegada y gozosa de presentarla a los demás con la suficiente  fuerza sugestiva, con la diafanidad necesaria para ser comprendida, con la armonía y belleza tentadora que pueda incluso mover al alumno a investigarla por propia iniciativa.

12. Los maestros verdaderos, los que tienen la encomienda y responsabilidad de enseñar en la Iglesia y en la sociedad, deben hacerlo con apertura, sin segregacionismos temerosos o interesados, aunque naturalmente con  altura intelectual y moral, lucidez y firmeza. 

13. Por lo tanto la función del docente, no es una actividad creadora ni imperativa, sino una amigable comunicación, operativa entre maestro y discípulo, a fin de que este vaya actualizando en su mente las virtualidades latentes de su potencia cognoscitiva los gérmenes de ciencia que recibió por naturaleza. Porque el hombre no se encuentra, con relación a la ciencia, en un estado de pura potencia pasiva, sino en potencia activa. 

14. El maestro, no es un artista ni un autor que pueda poner su ideal y su gloria en la originalidad de su obra, sino un asistente cuya actitud fundamental debería ser de humildad y de servicio, siempre atento a despertar y no suplantar la natural perspicacia de cada alumno. Porque puede suceder incluso, que, para talentos particularmente dotados, la pretensión intemperante de enseñarles resultara un auxilio innecesario, es decir, un impedimento más bien. Un maestro digno de tal nombre y de la aureola de honor que se le debe, eminente en ciencia y no poder, contento con la oportunidad de comunicar aquella, y exento de la presunción de ejercer cualquier potestad, es aquel que acepta los condicionamientos de esas dos leyes que se le imponen: la iniciativa del alumno a quien sirve, y las exigencias de la verdad y la sabiduría que le perfeccionan y capacitan a él para servir y ayudar. 

15. Termino diciendo «la enseñanza es un acto de caridad y misericordia, y también de sabiduría  en cuanto que ésta es la fuente o principio rector de su acción docente». «Para el maestro bueno y fiel, la mejor gloria que corone su carrera será la vida virtuosa del discípulo» (Super Ep. Ad Tit., c. 2, lec, 2, n. 66).

† Faustino Armendáriz Jiménez
IX Obispo de Querétaro

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Reflexión de nuestro señor Obispo Don Faustino Armendáriz Jiménez, al Presbiterio de Querétaro, 18 de agosto de 2011

La Comunión


1. El Apóstol San Juan en la primera carta que dirige a los cristianos escribe con la conciencia que tiene que ofrecer herramientas para una maduración en la fe. El afirma: si tienen al Hijo de Dios, tienen la verdad, están en el camino del auténtico amor y están en comunión con Dios mismo (1 Jn 1, 3). Pero quizá nos engañamos a nosotros mismos cuando pretendemos estar en Cristo. Por eso precisa los criterios y las condiciones que nos permiten verificar si realmente andamos en la luz y vivimos en el amor.  

2. Dice: «Lo que hemos visto y oído se los anunciamos también a ustedes para que estén en comunión con nosotros, pues nosotros estamos en comunión con el Padre y con su Hijo Jesucristo» (1 Jn 1, 3).  

3. Los discípulos de Jesús están llamados a vivir en comunión con el Padre y con su Hijo Jesucristo muerto y resucitado, en la comunión en el espíritu Santo (2 Cor 13, 139. El misterio de la Trinidad es la fuente, el modelo y la meta del misterio de la Iglesia: un pueblo reunido por la unidad del padre y del Hijo y del espíritu Santo, llamada en Cristo «como sacramento, o signo e instrumento de la íntima unión con Dios y de la unidad con todo el género humano. La comunión de los fieles y de las Iglesias particulares en el pueblo de Dios se sustenta en la comunión con la Trinidad. (DA 155).

4. La Exhortación Apostólica postsinodal Verbum Domini, nos da pautas para entender y poder hacer una hermenéutica de lo que el Apóstol nos dice, cito: «En definitiva, la llamada al sacerdocio requiere ser consagrados «en la verdad». Jesús mismo formula esta exigencia respecto a sus discípulos: «Santifícalos en la verdad. Tu Palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así los envío yo también al mundo» (Jn 17,17-18). Los discípulos son en cierto sentido «sumergidos en lo íntimo de Dios mediante su inmersión en la Palabra de Dios. La Palabra de Dios es, por decirlo así, el baño que los purifica, el poder creador que los transforma en el ser de Dios».Y, puesto que Cristo mismo es la Palabra de Dios hecha carne (Jn1,14), es «la Verdad» (Jn 14,6), la plegaria de Jesús al Padre, «santifícalos en la verdad», quiere decir en el sentido más profundo: «Hazlos una sola cosa conmigo, Cristo. Sujétalos a mí. Ponlos dentro de mí. Y, en efecto, en último término hay un único sacerdote de la Nueva Alianza, Jesucristo mismo». Es necesario, por tanto, que los sacerdotes renueven cada vez más profundamente la conciencia de esta realidad» (Cfr. VD 80). 

5. Por lo que se refiere a la vida consagrada, el Sínodo ha recordado ante todo que «nace de la escucha de la Palabra de Dios y acoge el Evangelio como su norma de vida». En este sentido, el vivir siguiendo a Cristo casto, pobre y obediente, se convierte «en «exegesis» viva de la Palabra de Dios». El Espíritu Santo, en virtud del cual se ha escrito la Biblia, es el mismo que «ha iluminado con luz nueva la Palabra de Dios a los fundadores y fundadoras. De ella ha brotado cada carisma y de ella quiere ser expresión cada regla», dando origen a itinerarios de vida cristiana marcados por la radicalidad evangélica (Cfr. VD 83). 

6. Invito a cada uno de ustedes queridos sacerdotes,  en primer lugar, a «sentirse felices por el llamado que Dios nos ha hecho a vivir en comunión con él, esta es la clave de nuestra vida, quien no se siente feliz y realizado con el estilo de vida que el Señor le ha compartido, es momento de recomenzar desde Cristo. 

7. Segundo a ser conscientes que nuestra vida es «sacramento de unidad para la Iglesia», el hecho de haber sido introducidos en el Sagrado Orden, es ya la prueba que nuestra vida es comunión, la palabra «Orden» en su sentido más pleno se refiere a un grupo determinado no sólo jurídicamente sino que va más allá, tocando las entrañas de una realidad que es comunión. Pues con especial predilección se nos ha elegido no para estar en un coetus aislado de la realidad cristiana, al contrario para hacernos participes de la salvación de Cristo, renovando en su nombre el sacrificio redentor, preparando el banquete, fomentando la caridad, alimentando con la Palabra, fortificándolo con los sacramentos y consagrando su vida a Dios y a la salvación de sus hermanos nos esfuercen por reproducir en nosotros mismos la imagen de Cristo, dando testimonio constante de fidelidad y de amor (Cfr. Prefacio de la ordenación Sacerdotal).    

8. La vida consagrada no puede verse y sentirse excluida somos parte del mismo «Orden» solamente que con un carisma diferente al servicio de la Iglesia. Siendo un don del Padre por medio del Espíritu a su Iglesia, y constituye un elemento decisivo para su misión. Es un camino de especial seguimiento de Cristo para dedicarse a él con un corazón decisivo. 

9. «En comunión con los pastores, los consagrados y consagradas son llamados a hacer de sus lugares de presencia, de vida fraterna en comunión y de sus obras, espacios de anuncio explícito del evangelio» (Cfr. DA 217).

† Faustino Armendáriz Jiménez
IX Obispo de Querétaro


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Confirmaciones en la Parroquia de Jesús de Nazaret
El día 20 de agosto, nuestro señor Obispo D. Faustino Armendáriz Jiménez administró el sacramento de la Confirmación a una docena de jóvenes que recibieron preparación en la parroquia de Jesús de Nazaret, bajo el cuidado del Sr. Cura Pbro. Mtro. Filiberto Cruz Reyes.

Después de ser presentados a la comunidad y a nuestro señor Obispo, los jóvenes confirmandos escucharon al pastor diocesano, quien reflexionó con ellos de los signos del amor de Dios, llamados sacramentos, y como en cada uno de ellos, el Señor nos regala auxilios divinos que posibilitan a quienes los reciben el poder realizar con responsabilidad la misión que Dios pone en sus manos. Por ejemplo, quien vive el sacramento del Matrimonio, el Señor le regala las gracias especiales para que los nuevos esposos sean fieles en su matrimonio. Dios hace lo que le toca, nosotros abiertos a su gracia y a su poder debemos hacer nuestra parte. Hoy en el sacramento de la Confirmación, el Señor regala a estos jóvenes para que ellos con compromiso desde su Bautismo y ahora con la Confirmación, vivan en la comunidad de la Iglesia Católica, sus responsabilidades como cristianos y cristianas.

Los sacramentos son para fortalecer el camino de la vida cristiana y la responsabilidad de quien ha sido confirmado, es hacer presente en el mundo el amor de Dios, ser testigos del amor de Dios, y recibir los auxilios de Dios para que esto sea posible. «Ustedes que tienen una conciencia más clara de lo que hacen en este momento, colaboren en su comunidad a propagar la buena nueva, en la misión que estamos impulsando en toda nuestra Diócesis de Querétaro».

«Misión de salir de nuestros templos, de nuestras estructuras, y dejar las estructuras caducas y que cada católico se convierta en un discípulo misionero que anuncie en las calles y en todo lugar, la Palabra del Señor. Son tiempos en que nuestra Iglesia Católica, con responsabilidad y audacia debe anunciar la luz de la Palabra de Dios, compartir nuestra fe a los demás. No importa que no profesen nuestra misma fe, pero comparten el amor de Dios, que eso si es común a todo ser humano. Ser testigos del amor de Dios, defensores de la fe, responsables de la propia formación. Que el Espíritu Santo les recuerde los compromisos que adquirieron en el Bautismo y ahora por la Confirmación, los cumplan con el auxilio del Señor». 

Así concluyó la homilía nuestro señor Obispo D. Faustino Armendáriz Jiménez, quien se dispuso a signar a los jóvenes con el santo crisma.

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XXIII DOMINGO ORDINARIO (Ciclo A)
1. LECTURA DEL TEXTO: Mt 18,15-20
(Se pide la luz del Espíritu Santo)


Espíritu de verdad, condúcenos a la plenitud. Tú que das testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios, Concédenos experimentar y apreciar en nuestro interior
la riqueza de la gracia divina, para que seamos llenos de verdadera alegría espiritual
y de consuelo divino. Tú que conoces las profundidades de la divinidad, danos un conocimiento profundo de Dios, para que nos unamos a Él con todo nuestro corazón y formemos con él un solo Espíritu. Amén.

(Cada uno lee en su Sagrada Escritura)
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Si tu hermano comete un pecado, ve y amonéstalo a solas. Si te escucha, habrás salvado a tu hermano. Si no te hace caso, hazte acompañar de una o dos personas para que todo lo que se diga conste por boca de dos o tres testigos. Pero si ni así te hace caso, díselo a la comunidad; y si ni a la comunidad le hace caso, apártate de él como de un pagano o de un publicano.
Yo les aseguro que todo lo que aten en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desaten en la tierra, quedará desatado en el cielo.
Yo les aseguro, también, que si dos de ustedes se ponen de acuerdo para pedir algo, sea lo que fuere, mi Padre celestial se lo concederá; pues donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos».
Palabra de Dios.

Repasar el texto leído
(Se pregunta a los participantes y responden leyendo los versículos en su Biblia)
¿Qué se debe hacer su un hermano llega a pecar? v.15a
¿Si escucha qué sucederá? v.15b
¿Si no escucha qué se debe hacer? v.16
¿Si no escucha a dos o tres que lo corrigen qué se debe hacer? v.17a
¿Si no escucha a la comunidad qué se debe hacer? v.17b
¿Qué asegura Jesús a sus discípulos? v.18
¿Qué sucede si dos personas se ponen de acuerdo para pedir algo? v.19
¿Qué sucede donde dos o más personas se reúnen en el nombre de Jesús? v.20

Explicación del texto
Este texto nos habla del perdón fraternal que debe vivirse en la comunidad de la Iglesia con aquel hermano que ha cometido una falta. Se trata de una falta grave y pública que no se ha cometido necesariamente contra al que la corrige. Es una instrucción sobre el buen uso de la disciplina comunitaria, no es una reglamentación, supone que ya hay unas reglas, pero se debe hacer uso prudente de ellas.
La prioridad es: que se le haga saber las reglas no solo por uno, sino por dos testigos; explicarle la gravedad de las decisiones que puede tomar la comunidad; la obligación de perdonar de quienes pertenecen a la Iglesia de Cristo y la exigencia de la misericordia para todo aquel que pide perdón.

La voluntad de Dios es que ninguno se pierda, por eso se debe evitar la excomunión inmediata del hermano que peca. Debe haber una corrección personal, la primera precaución es no alborotar a toda la comunidad, debe hacerse una reprensión fraterna, pero no privada, porque quien corrige debe tomar conciencia de que representa a la Iglesia. Esta represión no busca que solo se tome conciencia del pecado sino del arrepentimiento. Se debe ganar al hermano, pero no como un amigo personal, sino como miembro de la Iglesia (comunidad) que está apunto de abandonar.

La instrucción insiste en la paciencia que se debe tener con el pecador. En vez de romper a la primera negativa, se deben hacer dos intentos más para convencerlo. Se trata de proteger al pecador contra la arbitrariedad y la precipitación en el uso de las medidas disciplinares.

La comunidad es la «Iglesia», la asamblea de los hermanos. Si el pecador no escucha a la Iglesia entonces deben considerarlo como al pagano y al publicano. Es decir, como personas impuras, ajenas, con las cuales se creía no tener nada en común. Seguramente no se trata de una expulsión definitiva de la Iglesia, sino un tiempo de prueba, pues iría en contra del deseo de Jesús de salvar lo que está perdido. Jesús da el poder a la comunidad de sus discípulos de «atar» y «desatar», no significa probablemente prohibir o permitir, sino pronunciarse en contra de una medida disciplinar propuesta contra un hermano. La comunidad debe usar las reglas con prudencia y misericordia.
La presencia de Cristo en su Iglesia afecta a las decisiones disciplinares. No se trata de una mera administración humana; las decisiones no se deben tomar arbitrariamente sino en oración.

2. MEDITACIÓN DEL TEXTO
(Cada participante puede compartir su reflexión personal)

Jesús nos enseña cómo actuar con los hermanos cuando hay conflictos en la comunidad que es la Iglesia y en nuestros grupos o pequeñas comunidades y familias, que es el lugar donde vivimos nuestra partencia a la Iglesia. No se trata de un pecado en sentido moral ni de una ofensa personal, sino de una falta contra la comunidad. Estas situaciones se han dado no sólo en la comunidad de san Mateo, se siguen dando hasta el día de hoy. El evangelista nos ayuda a pensar desde el amor y el perdón predicados por Jesús.

Cuando un hermano se ha separado de la comunidad, debemos emplear todos los recursos para hacer que vuelva. Esta búsqueda debe hacerse con respeto y amor: primero en privado, para no ponerlo en evidencia ante la comunidad, pero quien lo haga debe tener un verdadero espíritu comunitario. Si no hace caso, hay que mostrarle su falta en presencia de algunos testigos, para que descubra que la falta es patente para la comunidad. Como último recurso, se debe reunir a la comunidad, la cual en caso de obstinación deberá reconocer dolorosamente la situación en la que este hermano se ha puesto a sí mismo. Será como un extraño para la comunidad.

La comunidad, la «Iglesia» tiene la capacidad que Jesús le ha otorgado de decidir en cuestiones disciplinares. Tiene la autoridad para atar y desatar. Tiene el mismo poder de Pedro, que es el mismo de su señor: hacer presente en la tierra el juicio del Padre que está en los cielos, el cual no quiere que sus hijos se pierdan. Pero debe hacerse en un clima de oración para tomar las mejores decisiones, y asegurar a los discípulos, reunidos en el nombre de Jesús, que el Padre escuchará su oración. Jesús está en medio de su Iglesia, lo cual hace que la confianza sea grande. La comunidad que se reúne en el nombre de Jesús vive la experiencia del resucitado que está en medio de ellos.

Una comunidad cristiana está madura espiritualmente en la medida que es capaz de ejercer la corrección fraterna.

3. COMPROMISO PERSONAL Y COMUNITARIO
(Cada participante puede proponer compromisos personales y comunitarios)
o Toma conciencia de que eres parte de la Iglesia, de una comunidad de bautizados, de la que has recibido la fe y con quienes la debes expresar públicamente.
o Intégrate a un grupo o comunidad en tu parroquia, para que vivas el verdadero sentido de pertenencia a la Iglesia.
o Corrige con prudencia en tu familia o en tu grupo a quienes se equivocan, con el único interés de hacerles un bien y no hacerlos quedar mal ante los demás.
o Haz oración en tu hogar con tu familia para que se fortalezcan los lazos de comunión con cada uno y con Jesús.
o Buscar la unidad entre los diferentes grupos y comunidades de la parroquia para hacer misión permanente, anunciando el evangelio de Jesucristo a los hermanos indiferentes o alejados
o Acudir a los momentos de oración comunitaria para pedir por la paz de nuestra patria, de nuestras familias y de nuestros corazones.

4. ORACIÓN
(Se puede hacer una oración donde participe quien guste en voz alta y den gracias a Dios por la Palabra escuchada o recitar alguna oración ya formulada)
Salmo 94
Señor, que no seamos sordos a tu voz. Vengan, lancemos vivas al Señor, aclamemos al Dios que nos salva. Acerquémonos a él, llenos de júbilo, y démosle gracias.
Vengan, y puestos de rodillas, adoremos y bendigamos al Señor, que nos hizo, pues él es nuestro Dios y nosotros, su pueblo; él, nuestro pastor y nosotros, sus ovejas.
Hagámosle caso al Señor, que nos dice: «No endurezcan su corazón, como el día de la rebelión en el desierto, cuando sus padres dudaron de mí, aunque habían visto mis obras».

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Primeros pobladores de nuestra Diócesis

1 Querétaro quedó ubicado en esa franja que separa a los nómadas de los sedentarios. Por esta razón, la entidad tuvo migraciones de las dos partes que impidieron fijar elementos culturales propios. Es casi seguro que los primeros pobladores se hayan establecido en la Sierra Gorda. Habitaron los pequeños valles entre las montañas. Al principio, eran cazadores y recolectores; después, agricultores y mineros. Las poblaciones más importantes fueron Ranas y Toluquilla. Sus vasijas y figurillas tuvieron gran influencia Olmeca. Los minerales explotados eran la plata, el plomo, la fluorita, el mercurio y el cinabrio. Otras tribus prefirieron las tierras fértiles de los valles queretanos, favorecidas por el riego. Esta zona fue más poblada.

2 Por los restos óseos encontrados en la Cueva de San Nicolás, es un cerro próximo a San Juan del Río, se supone que las tribus ya estaban ahí entre los 2 500 y 1 500 años. (a EN.) En esta misma región se han hallado objetos de barro para el uso doméstico, y de piedra como metales y molcajetes. Las ruinas de centros ceremoniales y de otras construcciones localizadas en el Barrio de la Cruz, El Rosario y Las Peñitas, en el municipio de San Juan del Río, y las de El Pueblito, en el de Corregidora , nos dan pie para deducir que esos lugares fueron cuna de culturas con alto grado de desarrollo, con clara influencia teotihuacana. La principal actividad en estos valles fértiles, por supuesto, fue la agricultura. Donde fue necesario, construyeron terrazas. Introdujeron el riego. El auge y la decadencia de todos estos pueblos estuvieron vinculados tanto a los yacimientos mineros como al ocaso de las tribus guerreras que merodeaban por la región.

3 Gracias a los estudios de los antropólogos se sabe que los habitantes de Ranas y Toluquilla mantuvieron comunicación más o menos frecuente con los teotihuacanos, huastecos y la cultura del Tajín; en su cerámica y escultura se nota cierta influencia de dichas culturas. Entre los pobladores de la región de los valles del sur de la entidad, la penetración de teotihuacanos y toltecas dejó huellas en su cerámica y arquitectura.

4 De acuerdo con los vestigios localizados en diversos sitios localizados en diversos sitios, al perecer fue hasta mucho tiempo después de la llegada de los primeros pobladores a territorio queretano, cuando se inicio la conformación de una civilización con rasgos más o menos comunes. Hasta aproximadamente 600 a 900 años de nuestra Era oleadas de grupos otomíes invadieron territorio de los valles queretanos. Se impusieron sobre los grupos allí establecidos para iniciar así un proceso de aculturación mutua. A partir de este acontecimiento, se inició una nueva etapa en la evolución de los pueblos primitivos.

Mientras eso sucedía en la región sur del territorio, la parte norte y media se veían afectadas por una serie de fenómenos climatológicos que obligaron a buena parte de sus habitantes, a emigrar hacia otros rumbos. Una prolongada seguía arruinó los cultivos; los alimentos escasearon, la actividad minera decayó y por si eso fuera poco la región fue paulatinamente invadida por grupos de nómadas provenientes de Árido América. Como consecuencia, los importantes centros de Ranas, Toluquilla, Quirimbal y otros más, frenaron su desarrollo. De esta manera, la frontera mesoamericana sostenida por dichos pueblos empezó a decaer.

5 A los habitantes serranos se les presentó una alternativa: quedarse en su lugar de origen a convivir con los invasores u optar por salir en busca de mejores condiciones de vida. Unos eligieron la primera opción e iniciaron un mestizaje que los convirtió en sedentarios. Situación que prevaleció en buena parte de esos grupos hasta después de la llegada de los españoles a la región.

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Más de 760 mil pobres en el Estado.
° Los más pobres Pinal de Amoles, Landa de Matamoros, Arroyo Seco, y Tolimán.


Gerardo Pérez Retana, Delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en Querétaro, dio a conocer que en el Estado hay 760 mil pobres (Estado de Querétaro cuenta con 1’827,937 habitantes) , de los cuales tan sólo en 2010 se sumaron 141 mil adicionales, «es decir, la pobreza extrema en Querétaro creció en más de 30 mil personas, teníamos 93 mil 400 y llegamos a 125 mil, arriba de los 3 puntos».
Pérez Retana consideró que la razón de aumento de pobres en el Estado se debió principalmente a la crisis económica de 2009 que generó cierres de establecimientos, baja producción en las empresas, «y esta recesión fuerte fue la que marcó al cierre de 2009 que se incrementara el número de pobres, pero en este sentido sería muy conveniente ver la siguiente encuesta ingreso/gasto que se hace cada 2 años y ver cómo se modifican las cifras».
Puntualizó que el CONEVAL divide a la pobreza en 2 parámetros, uno es el relacionado con los ingresos de las personas y otro respecto a la cobertura de sus derechos sociales: el parámetro de ingreso marca que aquellos que estén por debajo de la línea de bienestar con alrededor de mil pesos por persona al mes en una familia, apenas tendrían para una canasta básica pero ganando menos de esa línea se considera que sería pobreza extrema y la pobreza moderada se considera cuando no nada mas eso sino que no tienen para hacer otros gastos por ejemplo pago de transporte, educación, salud, ropa, y otros bienes necesarios.
Detalló que este Consejo también considera 6 derechos sociales: alimentación, salud, seguridad social (pensiones y jubilaciones, etcétera); educación, vivienda; derecho de equipamiento de servicios de agua, luz, drenaje etcétera, «estos son los que están siendo medidos y cuando hay más de 3 de estos que faltan también se considera que las personas están en situación de marginación grave y pobreza extrema».
Jorge López Portillo, titular de la Secretaría de Planeación y Finanzas del estado de Querétaro, durante la glosa del informe de actividades confirmó que Pinal de Amoles es el municipio que se ubica en el sector de pobreza extrema, mientras que el rubro de pobreza y marginación se ubican Landa de Matamoros, Arroyo Seco, Pinal de Amoles y Tolimán.
De acuerdo a la información proporcionada por el secretario de Planeación y Finanzas, derivado del crecimiento poblacional que se ha registrado en la entidad en los últimos 10 años se han duplicado las demandas en vivienda, empleo y salud, donde en salud se requieren atender en mayor proporción las enfermedades crónicas degenerativas, así como la demanda de los jóvenes y la de los migrantes que exigen servicios públicos. En este sentido Jorge López Portillo, aseveró que es a través del programa Soluciones con una inversión de dos mil 559 millones de pesos que se busca mitigar para el 2011, los problemas de marginación social.

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DE PARROQUIA EN PARROQUIA
Pbro. Reynaldo Huerta Cerna
deparroquiaenparroquia@hotmail.com

¡LOS SALUDO CON EL GUSTO DE SIEMPRE!, Todavía estamos colocando las bases para realizar el recorrido con provecho.
La llegada a la parroquia es alrededor del mediodía. Estas son algunas de las preguntas que pudiera hacer en la entrevista al señor Cura párroco: ¿Cómo describe su parroquia, física y pastoralmente hablando? ¿Qué retos existen? Desde que usted llegó aquí, ¿qué transformaciones ha habido? ¿Cuántos y qué Sacerdotes y religiosas son originarios de esta parroquia? ¿Algún mensaje a sus feligreses? Si por algún motivo, el señor Cura no pudiera estar cuando yo vaya a la parroquia, por favor, deje este cuestionario contestado con alguien, por ejemplo con el padre vicario, la secretaria, el sacristán, o cualquier otra persona ó envíemelo al correo electrónico especificado arriba.
Les escribo los números de mis teléfonos celulares: 442-207-5053 y 442-378-6340.
He aquí una tabla con los nombres de los poblados o colonias, que son sede de las parroquias con la fecha de las visitas.

¡DIOS NOS CONSERVE ALEGRES EN SU SANTO SERVICIO!

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La Dimensión Diocesana para la Pastoral de la Salud de la Comisión Diocesana para la Pastoral Social

invita al
DIPLOMADO EN PASTORAL
DE LA SALUD

Inicia el lunes 29 de agosto
y el sábado 3 de septiembre
Informes en los tels. (442) 214-55-27
y 212-01-94men el Hospital del Sagrado
Corazón de Jesús
Santiago de Querétaro, Qro.

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