martes, 25 de agosto de 2009

Comuniòn Querètaro 30 de agosto 2009 Nº 602

Visita la web de la Parroquia de Ntra. Sra. de Lourdes de la Col. Lazaro Cardenas, aquì encontraras nuestro Semanario Comunión, visita la pagina en: http://www.actiweb.es/nuestraparroquia/index.html



Hacia la XXI Asamblea Diocesana de Pastoral
Tercera Preasamblea Diocesana de Pastoral



Con el objetivo: «Conocer, complementar y aprobar el Plan Diocesano de Pastoral 2010-2016, para que a partir de él, todas las Parroquias hagan su adaptación y aplicación según sus procesos y realidades concretas» el 18 y 19 de agosto del 2009, en el Seminario Conciliar de Querétaro se realizó la Tercera Preasamblea Diocesana de Pastoral. Asistieron casi todos los Sacerdotes de nuestra Diócesis, el Seminario, un grupo de Religiosas y 3 laicos por parroquia. Se contó con la presencia de 106 parroquias de las 107 de nuestra Diócesis. Los lemas elegidos para esta Preasamblea fueron 1. A todos nos toca recomenzar desde Cristo. 2. Con el Plan de Pastoral, la familia a prefundar. 3. Con el Plan de Pastoral, un despertar vocacional.
Los pasos previos a esta Preasamblea han sido: 1 °. Primera Preasamblea Diocesana de Pastoral 16 de marzo; segunda Preasamblea Diocesana de Pastoral 5 de mayo. 2° Del 16 de junio al 15 de agosto la Vicaria de Pastoral realizó las fichas de la 23 a la 49 para presentarlas en la Tercera Preasamblea de Pastoral. 3°. El jueves 30 de julio se realizó la reunión de Decanos para ultimar detalles de la Tercera Preasamblea.
El martes 18 de agosto, propiamente fue un retiro desde antes de las nueve de la mañana, los participantes empezaron a llegar, la Hna Raquel Piña junto con otras religiosas, confirmaban la inscripción o inscribían a los que aun no lo habían hecho. En punto de las nueve y media de la mañana el M. I. Sr. Cango. J. Guadalupe Martínez Osornio, dio la bienvenido y la presentación por Decanato de los participantes. Después de este momento nuestro señor Obispo dio el saludo y después el padre Fidencio López, Vicario de Pastoral, hizo la ubicación, dio a conocer el objetivo, el lema, la temática y el programa de la Preasamblea, utilizando las páginas 53, 1,11 y 12 del folleto de la Preasamblea.
A las diez de la mañana el padre Rector del Seminario Martín Lara presidio solemnemente el rezo de Laúdes con una magnifica reflexión a la lectura Bíblica. Los temas de este retiro fueron sacados del objetivo General. El Tema 1 fue «Recomenzar desde Cristo», la espiritualidad a partir de la experiencia fundante en la vida Cristiana, la reflexión fue dirigida por el padre José Luis Salinas. Después del descanso el tema 2 fue «Refundar la Familia» La espiritualidad de la vida cristiana a partir de la familia. La reflexión fue dirigida por el padre Jaime Gutiérrez. El tema 3 fue «Reencontrar el sentido de la vida» La espiritualidad vocacional como un reencuentro del sentido de la vida. La reflexión fue dirigida por el padre Rogelio Balderas B. Cada tema termino con una oración y un canto de todos los presentes. Al filo de la una de la tarde se llevó a cabo la santa Misa presidida por nuestro señor Obispo, al termino de esta se disfruto de la comida que ofreció el Decanato del Santo Niño.
Por la tarde tras un breve descanso el padre Fidencio López en el primer momento hizo la presentación del Objetivo general, al Objetivo especifico y criterios generales (fichas de la 23 a la 27) mas tarde el padre J. Guadalupe Alcántara hizo la presentación y trabajo sobre las prioridades. Utilizando las páginas 8, 9, 10 y 11 del folleto de la Preasamblea. Explicó como fue el discernimiento sobre lo que hay que trabajar, además explico el objetivo de cada una de las prioridades y los criterios generales.
En un segundo momento se trabajo por decanatos, el padre J. Guadalupe Alcántara, dio las indicaciones y después cada Decanato realizó su trabajo; el trabajo consistió el revisar el objetivo, y los objetivos de cada prioridad, si se modificaban, cambiaban, se agregaba o quitaba algo. El Primer día de esta Preasamblea terminó con el plenario del trabajo realizado en los decanatos, el cual fue coordinado por el padre Saúl Ragoitia. Continúa Pág. 3











Homilía de nuestro señor Obispo D. Mario De Gasperín Gasperín, en la fiesta de la Asunción de María al cielo

Hermanas y hermanos:
1. La santa Iglesia nos invita, en esta hermosa solemnidad, a elevar nuestros ojos «a los bienes del cielo» a fin de que mantengamos viva la esperanza de llegar a disfrutar de ellos, de los bienes del cielo, por siempre. Hay bienes en el cielo. Y muchos. Y mejores que los terrenales, no lo olvidemos. Nosotros somos peregrinos en este mundo, caminantes con los pies en la tierra pero con la mirada en el cielo, buscadores de eternidad.

2. ¿Qué estamos invitados a contemplar en el cielo? ¿Dónde está el cielo? ¿Qué hay en él? El cielo no son los astros ni las nebulosas ni las constelaciones. El cielo está lleno de Dios y Dios llena el cielo. El cielo es Dios. Y el que tiene a Dios, tiene el cielo. ¿Qué hay en el cielo, en el corazón de Dios? San Juan, en el Apocalipsis, nos abre una pequeña ventana para mirar el secreto de Dios: «Se abrió el templo de Dios y dentro se vio el arca de la alianza». Recordemos que el arca de la alianza era el templo portátil, que llevaban los israelitas a través del desierto, como signo, como sacramento de la presencia de Dios. Desde allí Dios se comunicaba con su pueblo, por medio de Moisés y del sacerdote Aarón. Era el oráculo de Dios.

3. En su interior, guardaba las tablas de la Ley de Dios, los Mandamientos, el pacto sellado con Israel. Contenía además un recipiente con maná, el «pan del cielo» con el que Dios alimentó a su pueblo en el desierto, y la vara de Aarón, signo de su poder sacerdotal. Palabra de Dios, pan del cielo y sacerdocio era la riqueza espiritual del arca de la alianza. Esta arca de la alianza, cuando la destrucción del templo de Jerusalén, desapareció y nunca fue encontrada en esta tierra. Como el cuerpo de Moisés, así también el arca de Dios, no están en este mundo.

4. Por eso, no nos debemos sorprender que a continuación san Juan nos diga que en ese momento, cuando contempló el arca, «apareció en el cielo una figura prodigiosa: una mujer envuelta en el sol, con la luna bajo sus pies, con una corona de doce estrellas en la cabeza», que estaba encinta y a punto de dar a luz un hijo varón. Toda la tradición cristiana ha visto en esa mujer a María santísima, y en las letanías lauretanas le decimos «arca de la alianza, ruega por nosotros». En efecto, María santísima es la que lleva en su seno la santa Palabra de Dios, al Verbo encarnado, al Evangelio del Padre, a Jesucristo nuestro Señor. María santísima es la mujer eucarística que lleva en sus entrañas al «verdadero Pan bajado del cielo», Jesucristo nuestro Señor, concebido por obra del Espíritu santo. María santísima es la que formó en sus entrañas el cuerpo sacerdotal de su Hijo Jesucristo que, en la cruz, como sacerdote y víctima, lo ofreció en sacrificio por nosotros. María Santísima es la verdadera arca de la nueva y eterna alianza, porque es la que nos trajo, lleva consigo y nos dio a Jesucristo nuestro Señor.

5. en el santo evangelio la vimos atravesar presurosa las montañas de Judea, llevando en su seno, como verdadera arca de Dios, a Jesucristo el salvador. Por eso la Iglesia nos invita a alegrarnos todos en el Señor para celebrar con jubilo al Hijo de Dios cuya Madre fue exaltada sobre los coros de los ángeles y de los santos del cielo. Podemos imaginar la fiesta que se celebró en el cielo, con todos los coros angélicos y celestiales, recibiendo y coronando su Hijo a su Madre santísima; «Hijas de reyes salen a tu encuentro… entre alegría y regocijo van entrando en el palacio real. De pie, a tu derecha, está la reina, enjoyada con oro de Ofir», decimos cantando con toda la Iglesia en esta celebración. 

6. Pero este triunfo de la hija del Rey, de la Reina, no fue sin lucha, sin dolor. «Apareció otra figura, un enorme dragón, color de fuego, con siete cabezas y siete cuernos, y una corona en cada una de sus siete cabezas. Con su cola barrió la tercera parte de las estrellas del cielo y las arrojó sobre la tierra». El poder del mal es real, verdadero, cercano a nosotros y actúa aquí en la tierra. Es «enorme» frente a la débil mujer; aparece poderoso, frente a la mujer y la puede devorar fácilmente; es «color de fuego», deslumbra fácilmente con su sola presencia; siete cuernos, siete cabezas, con coronas de reyes… es prepotente, arrogante, está en todas partes y sólo con su cola «barre la tercera parte de las estrellas del cielo», también las estrellas que coronaban a la mujer. Ésta tuvo que huir al desierto «en un lugar preparado por Dios». Dios no la abandona, no la olvida, la cuida y le dará, después de la lucha, la victoria. Porque esa mujer es signo de vida, portadora de vida: está encinta y dio a luz un hijo varón. Es la lucha de la vida contra la muerte, del bien contra el mal, de la fe contra la incredulidad, de la obediencia a Dios contra la soberbia de los poderosos de este mundo.
 
7. Pero su triunfo es efímero, porque ese hijo varón, nacido entre persecuciones y apremios, en la más desoladora humildad, en la penuria del desierto, ese hijo de esa mujer «está destinado a dominar todas las naciones con cetro de hierro… y será llevado hasta Dios y hasta su trono». Ese es Jesús, el Hijo de esa Mujer débil y perseguida, es nuestro Pastor glorificado, nuestro gran sacerdote resucitado, el que fue crucificado y ahora vive y reina por los siglos. Y esa mujer perseguida es también la Iglesia de Jesucristo en su condición actual. Por eso san Juan, a la visión añade la voz: «Entonces oí en el cielo una voz poderosa, que decía: «Ha sonado la hora de la victoria de nuestro Dios, de su dominio y de su reinado, y del poder de su Mesías».
 
8. Hermanas y hermanos: A esa voz poderosa, con los ángeles y los santos, nosotros ahora unimos nuestra débiles voces para dar gloria a nuestro Dios, al Cordero inmolado, y a la Reina enjoyada con oro de Ofir. A esas y a nuestra voces se unen la voces silenciosas de los niños sacrificados, de los pequeños maltratados, de los pobres escarnecidos, de los mártires torturados, de los concebidos abortados, de los indígenas olvidados, de los migrantes vejados, en fin, de toda la humanidad doliente que con Cristo grita desde la cruz: «Padre, ¿por qué me has abandonado?» y que nadie  parece escuchar aquí en la tierra, pero que, sin embargo, encuentran eco en los oídos de Dios y en sus manos acogedoras: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu». Jesús descansó su dolor en los brazos poderosos del Padre, quien le hizo justicia, lo resucitó de entre los muertos y lo sentó a su derecha como Señor. Ante él, todos los poderosos de la tierra, de rodillas, tendrán que devolver las estrellas de sus coronas que le robaron. Y María, la Madre de Jesús y Madre nuestra por voluntad suya desde la Cruz, ahora aparece en el cielo como la «gran señal», el gran signo de la humanidad redimida y de la Iglesia rescatada. La profecía de María se cumple hoy en la tierra en toda su plenitud: «Dichosa me llamarán todas la generaciones». Ahora nos toca a nosotros, esta generación, cumplir esta profecía y lo estamos haciendo en esta celebración. Después, por la infinita misericordia de Dios, esperamos seguirla cumpliendo en el cielo con el coro de los bienaventurados. Que así sea.
† Mario De Gasperín Gasperín
VIII Obispo de Querétaro










Tercera Preasamblea Diocesana de Pastoral

El miércoles 19 de agosto, se tuvo un conocimiento, complementación y aprobación de las fichas 23 - 49 con las sugerencias para hacer el Plan Parroquial. Las actividades iniciaron con el rezo de Laúdes que presidio solemnemente el padre Martín Lara de nuevo con una magnifica reflexión a la lectura Bíblica. Terminada la oración el padre Gabriel Álvarez, hizo la ubicación y el explico el trabajo a realizar durante el día. El tercer momento de la preasamblea consistía en que cada Decanato conociera cada una de las Comisiones de pastoral, lo que se había aportado de cada una de las parroquias, y si era necesario modificar, cambiar, agregar o quitar algo. Se trabajo primero en revisar la Comisión Diocesana para la Pastoral Profética, la Pastoral Litúrgica y la Pastoral Social. Después de un breve descanso se siguió trabajando por Decanatos, se trabajó ahora en revisar la Comisión Diocesana Pastoral para la familia, juventud y laicos; la Pastoral de Vocaciones y Ministerios y finalmente para la Pastoral de las Comunicaciones. Al término de este trabajo el padre Saúl Ragoitia coordinó un plenario por muestreo, no todos los Decanatos pasaron. No podía faltar como en cada Asamblea y Preasamblea la participación de nuestro Señor Obispo D. Mario De Gasperín con sus atinados comentarios y puntualizaciones al trabajo realizado. Por la tarde, después de la comida que ofreció el Decanato de Santiago y un merecido descanso, el padre Fidencio López, presentó las orientaciones y acuerdos para elaborar el Plan Parroquial de Pastoral, utilizando la página 51 del folleto de la Preasamblea, en todo momento animando a realizar este trabajo y ponerle mucho empeño. Mas tarde hubo algunos avisos de las Comisiones de Pastoral. Al filo de las 6 de la tarde, nuestro señor Obispo presidió la Santa Misa, en la homilía invito a interpretar los acontecimientos políticos y sociales, que estamos viviendo, la Palabra de Dios nos ilumina y vemos la situación en la que se mueve nuestra patria, lo que nos está aconteciendo, somos los llamados a ser la vid, donde el pueblo de Dios encuentre frutos, cobijo, para que no se genere la destrucción... Para esto hay que recomenzar desde Cristo. Pidamos que nos enseñe a cumplir nuestra vocación, que es crear a su Imagen, en reproducir la Imagen de su propio Hijo Jesucristo.








Secretaría del Obispado
Apartado Postal 49
Tel. (442)2-24-07-38 Fax. (442) 2-12-18-45
Santiago de Querétaro, México
C.P. 76000

Prot. 39/09

Sr. Mario Piedra Ulloa
Ciudad


Respetable Señor:


Lo saludo atentamente y le comunico que, mediante las presentes, retiro a Usted la Autorización que le concedía el día 18 de Febrero de 2004 (Prot. 14/2004) para colaborar, bajo la dirección de Mons. Salvador Espinosa Medina, Vicario General, con el Equipo de Presbíteros encargados de atender los casos de personas que presentan fenómenos relacionados con alguna posible influencia del demonio. No contará Usted, de esta fecha en adelante, con ninguna autorización para seguir participando como «consultor en el tarea de discernimiento de los supuestos afectados» ni con el equipo señalado ni con cualquier otro, mucho menos por cuenta propia. Usted, como fiel católico, deberá integrarse a su parroquia para que, si lo desea, pueda colaborar bajo la responsabilidad de su párroco y bajo sus indicaciones en la vida de la comunidad. Agradezco a Usted las atenciones prestadas a las personas que recurrieron a sus servicios y pido a Dios lo ilumine y guíe para que pueda dar testimonio de amor y fidelidad a Jesucristo en su santa Iglesia católica. Reciba mi saludo y oración.

Santiago de Querétaro, Qro., 5 de Agosto de 2009.


+Mario De Gasperín Gasperín
Obispo de Querétaro

Lic. Ana Isabel Romero Ugalde, mjh
Secretaria Canciller

C.c. a los Sres. Vicarios Generales y a los Padres Decanos.







58° Peregrinación Anual de Obreros y Mujeres de pie a la Basílica de Nuestra Señora de los Dolores de Soriano

A todos los devotos de nuestra Señora de los Dolores de Soriano, los invitamos a tomar parte de la 58° Peregrinación de Obreros y Mujeres de a pie de Querétaro a la Basílica para conmemorar la Festividad de la Santísima Virgen de los Dolores de Soriano.
La Misa de buen viaje será el sábado 19 de septiembre de 2009, a las 15:00 hrs., en el Templo de la Congregación, y la salida a las 4:00 de la tarde, para llegar a la Basílica el domingo 20 a las 9:00 de la mañana a la Celebración Eucarística.

Si desean pueden viajar en autobús e integrarse a la columna peregrina en la entrada a Soriano (por el callejón).

Para mayores informes puedes comunicarte con Edmundo Segura J, al tel. 2-61-28-41, Francisco López Lázaro al Cel. 442.327-41-58




Padre Juan Caballero y Osio
«Impulsor y humanista de la cultura y el arte»

«La multitud de los creyentes no tenía sino un solo corazón y una sola alma. Nadie llamaba suyos a los bienes, sino que todo era en común entre ellos» (Hch. 4, 32).

Posiblemente nació en la ciudad de Querétaro en enero de 1644, hijo del capitán español D. Juan Caballero y Medina y Doña Leonor de Osio.

Estudió en México y se graduó en Teología. Fue electo para ocupar el puesto de primer Alguacil mayor de la ciudad de Querétaro (presidir el gobierno de la ciudad), con jurisdicción civil y criminal, debió ser hacia 1669, cuando tenía 25 años. Cabe mencionar, que en estos mismos años su padre era capitán de las milicias reales de en Querétaro. Recibió la Ordenación sacerdotal en la cuaresma de 1667 en la ciudad de Puebla. Es increíble que desde que dejó el puesto de Alguacil Mayor de Querétaro, para prepararse a recibir las Ordenes Sagradas, cambia radicalmente su sentido de la vida y comienza a prodigarse hacia sus semejantes no solo en lo económico sin fundamentalmente en lo espiritual. Fue nombrado Comisario de Corte del Santo Oficio y Comisario de la Santa Cruzada.

Radico en la ciudad de Querétaro y fue el realizador de la Congregación de Nuestra Señora de Guadalupe; en 1676 se hizo cargo de la terminación con su patrocinio del Templo de la Congregación y ahí edifico la sala de Cabildos. Las obras fueron terminadas en el año de 1680, él mismo bendijo y dedico este templo. Entre 1680 y 1690 reedificó el Colegio de San Ignacio de Loyola y construyó el de San Francisco Javier y el Templo de Santiago Apóstol. A los colegios los dotó de cátedras de profesores y para su sostenimiento les donó una hacienda con cuarenta mil ovejas. Dio muchas becas para estudiantes pobres.

En 1685 patrocinó la terminación del convento y la edificación del Templo del Carmen; patrocinó la terminación del Convento y Templo de San Francisco, además edificó la Capilla del Santo Cristo, obras que se terminaron en 1698. En este Convento fundó la primera enfermería que tuvo la ciudad de Querétaro; terminó la construcción del Convento y Templo de Santo Domingo y fabricó ahí la Capilla de la Santa Casa de Loreto, las obras se terminaron en 1697. Por el año de 1698 en el templo de la Santa Cruz, construyó los cruceros y el camerín, y edificó la capilla de la Asunción anexa al Templo. En 1699 fue protector de las religiosas de Santa Rosa de Viterbo y construyó una capilla y un pequeño Convento; en 1700 reedificó el Convento y Templo de San Antonio, lo dotó de opulentos retablos de madera tallada y dorada con oro fino, así como también de notables esculturas de talla completa y estofada como el extraordinario san Francisco de Asís, además regaló a los religiosos Franciscanos Dieguinos de este Templo magníficos vasos sagrados, custodias y finísimos ornamentos para el servicio litúrgico. A varios templos los dotó de lámparas y ornamentos; fue patrocinador para la conquista espiritual y la colonización de las Californias, con el patrimonio económico «el fondo piadoso para las Californias».
Fundó más de sesenta capellanías para el clérigo (sacerdote) pobre; dotó a más de doscientas novicias para que ingresaran en los conventos.

En México, edifico el Templo y el Convento de EI Carmen; reedificó el Templo de Santa CIara; cooperó en la construcción del Colegio Belén, y durante treinta años ayudo a los alumnos; cooperó con la terminación de la portada del Templo de San Felipe Neri. En Guadalajara, terminó la construcción del Templo de Santo Domingo; en Tepotzotlán, construyó el edificio del noviciado de los padres jesuitas y patrocinó el funcionamiento de la institución. En España construyó el Templo de la ciudad de Logroño, le ofrecieron dos obispados en España, los cuales rechazó.


Aparte de toda esta obra material sería incalculable describir tantas y tantas obras de carácter ahora llamadas «sociales», entonces se decía que eran «obras de caridad», en que se prodigó a través de toda su vida auxiliando a enfermos, huérfanos, viudas, estudiantes, comunidades religiosas, colegios, etc., que lo colocan en la historia de la ciudad de Querétaro como uno de los mas grandes de sus benefactores.

Como es natural, nadie sabrá a ciencia cierta sobre la enfermedad que lo llevó a la muerte hay versiones que, quien lo dio todo a los pobres, finalmente quedó más pobre que los pobres. Falleció en la ciudad de Querétaro el 12 de abril de 1707, fue sepultado en la Capilla de la Santa Casa de Loreto. Por el año de 1870, se exhumaron sus restos y fueron depositados en el Templo de La Congregación.

Después de su muerte su obra benéfica prosiguió, dejó disposiciones testamentarias para que con el producto de cuatro de sus haciendas se efectuaran obras que ayudaran a los pobres.

Con estos fondos, en 1721 se inició la construcción del templo y convento de San José de Gracia de los pobres los cuales fueron terminados en julio de 1771; en 1778 se ayudó a la construcción del edificio de la Escuela Gratuita de primeras Letras de la Tercera Orden de San Francisco.

A más de 300 años de su muerte podemos decir que muchas de sus obras materiales están en pie y podemos disfrutar de su belleza. Su memoria casi esta olvidada y su magnifico ejemplo desafortunadamente ni ha sido imitado y menos superado, pues siendo muy rico en bienes materiales, lo era aún más en su generosidad. Ojala que en estos tiempos tan difíciles en que vive el mundo ahogado no solo en una crisis económica sino moral, Don Juan Caballero y Osio provoque una profunda reflexión, y se opere ese cambio urgente de mentalidad que se va haciendo natural de servir a los demás. El 18 de Octubre de 2007, se le hizo un homenaje en el Templo de la Congregación la Eucaristía fue presidida por nuestro señor Obispo Don Mario De Gasperín Gasperín, acompañado el Rector del Templo el Pbro. Lic. Alberto Montes y sacerdotes religiosos de las órdenes y congregaciones que gozaron de la generosidad de Don Juan Caballero.
Pbro. Francisco F. Gavidia Arteaga

Datos tomados: Revista Querétaro, Año II Num. 20 febrero de 1987. Gobierno del Estado de Querétaro.
«Don Juan Caballero y Osio» Eduardo Loarca Castillo. Talleres gráficos del Gobierno del Estado de Qro. Querétaro 1985.

martes, 11 de agosto de 2009

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martes, 4 de agosto de 2009

Comunión Querétaro N°599 9/agosto/2009

Voz de nuestro pastor...

Panes y pescados
Al suprimir la liturgia la lectura continua del evangelio de san Marcos y poner en su lugar el relato de la multiplicación de los panes de san Juan, nos está indicando que allí debemos poner especial atención; y relacionando el milagro de los panes y de los pescados con la pascua judía, san Juan lo está refiriendo a la pascua de Jesús, la Eucaristía. Todo está lleno de significados en san Juan.
La multitud sigue a Jesús porque veía los milagros que hacía con los enfermos. La crítica es velada. No está mal seguir a Jesús al ver los signos milagrosos, lo malo está en no ver más allá del interés personal, inmediato. A la fe se le exige ver más allá. Los milagros son signos de la gloria de Dios presente en Jesús, que reclama su adoración.
Alimentar a la multitud es iniciativa de Jesús y él ya lo tiene decidido. La pregunta es «de dónde» y cómo vendrá el sustento. La respuesta de Felipe apuesta por la economía, pero la suma de dinero, por más generosa que sea, no basta. Jesús pone a prueba, no los conocimientos económicos de Felipe, sino su fe. El problema del hambre pone al hombre en una verdadera encrucijada, y la solución no puede esperar.
El genio teológico de san Juan hace surgir una luz de generosidad en un donante anónimo, que ofrece cinco panes duros y dos pescados secos. El remedio es poco, casi ridículo, pero la generosidad enorme, con un componente de fe extraordinario al entregarlos a la comunidad. Jesús percibe de inmediato la grandeza del gesto y lo bendice con la esplendidez del milagro. La solución al problema del hambre en el mundo solo se remedia con la generosidad, la gratuidad y la confianza en Dios. Generadora del subdesarrollo es la falta de fraternidad.
En la Eucaristía, los cristianos aprendemos a poner lo nuestro, lo mínimo, el pan y el vino y a recibir lo máximo de Dios, el Cuerpo y la Sangre de su Hijo. Cada misa es una lección de gratuidad solidaria, que genera la comunión y produce la salvación.
Los judíos ven los signos, pero no comprenden el actuar de Dios. Quieren asegurarse la presencia de Jesús para convertirlo de salvador en abastecedor. El intento de manipular a Dios para que le resuelva sus problemas, es tan antiguo como el ser humano. Esperamos que venga alguien a resolvernos los problemas, o al menos a tener a quien culpar. No acercamos los panes y los peces a la mano de Jesús para que los distribuya, sino que estiramos el bazo para que lo llene sin esfuerzo.
En el proceso de la fe, el primer paso es reconocer que sin Dios nada podemos. Este es el pecado fundamental de lo economistas. Creen saberlo y poderlo todo. El segundo paso es poner en manos de Dios lo poco que tenemos; extender las manos no sólo para recibir sino para dar. Todos somos acaparadores de bienes. El tercer paso es arriesgarnos a perderlo todo y a quedarnos sólo con la confianza en Dios. Entonces el milagro brota generoso de las manos de Jesús: Todos se saciaron y sobraron doce canastos, uno para cada Apóstol, para que la Iglesia siga trasmitiendo esta fe, esta experiencia de Jesús y de la primera comunidad. Si así celebramos el milagro cotidiano del pan y del vino en la santa Eucaristía, se realizará en el mundo el milagro estupendo de los cinco panes y de los dos pescados.
+Mario De Gasperín Gasperín
Obispo de Querétaro










Provincia Eclesiástica Bajío
Directorio para la digna celebración de los Sacramentos de de la Iniciación Cristiana

Los obispos de la Provincia Eclesiástica «BAJIO» han decidido ofrecer a los sacerdotes, a los consagrados - consagradas y fieles laicos de nuestras diócesis el Directorio para una «digna y fructuosa celebración de los sacramentos de la iniciación cristiana».
La intención del documento es eminentemente pastoral; no pretende responder a todas y cada una de las cuestiones, ni quiere ofrecer una detallada casuística, ni dictar normas prolijas, ni prever cada abuso que pudiera presentarse. Su fin primordial es marcar criterios y establecer las normas básicas de la celebración de los sacramentos de la iniciación.
El Directorio se ha realizado con la valiosa aportación de pastoralistas, catequetas y teólogos de las diócesis de nuestra Provincia. Los obispos lo han revisado y lo han encontrado muy útil para que sea puesto en práctica. Lo presentan atendiendo a la misión que les corresponde de santificar a los fieles por medio de los sacramentos «cuya administración legítima y fructuosa regulan por su autoridad» (L.G. 26). El Código de Derecho Canónico afirma que los obispos son, en la iglesia a ellos encomendada, los moderadores, los promotores y custodios de toda la vida litúrgica. (Cfr. C.I.C. 835).
En virtud de la tarea que les corresponde, por la ley de la iglesia, de establecer normas obligatorias para todos en materia litúrgica promulgan este Directorio, confiando que será recibido con aprecio y docilidad y que responderá a los deseos, frecuentemente expresados, de contar con orientaciones precisas en esta materia.
A la venta en la Librería de la Curia Diocesana, Reforma 48, Centro Histórico, Santiago de Querétaro. Qro.









Hacia la XXI Asamblea Diocesana de Pastoral

Tercera Preasamblea Diocesana de Pastoral
18 y 19 de agosto de 2009
Seminario Conciliar Diocesano










Visita de animación a las Religiosas de Clausura Agustinas Recoletas
Nuestro señor Obispo Dr. D. Mario De Gasperín Gasperín, visitó el pasado sábado 25 de julio, el Convento de Clausura de las Agustinas Recoletas en Jalpan, cuidando de que tengan la debida atención espiritual.

El Monasterio de Santa Rita de Cassia se encuentra en construcción en la colonia La Cruz en Jalpan de Serra, mismo que han construido con trabajo, esfuerzo y sobre todo con la Providencia de Dios.

Si alguna joven está interesa en conocer más sobre la vida monacal, puede hablar al teléfono (441) 296-11-21 donde con gusto le atenderán.








Fiesta Patronal en la Parroquia de San Joaquín
El domingo 26 de julio, la Parroquia de San Joaquín festejó a su santo patrono, con la celebración Eucarística presidida por nuestro señor Obispo D. Mario De Gasperín Gasperín y concelebrada por el Sr. Cura Pbro. Francisco Montoya Ramos.

Niños y niñas hicieron su Primera Comunión en este día, y también el señor Obispo confirió el sacramento de la Confirmación. En la homilía, Mons. De Gasperín habló así a los presentes: «Sé que han preparado con grande esmero estas fiestas patronales. Que la Parroquia se encuentra en estado de misión y que se han preparado para los sacramentos, de la santa Eucaristía y de la Confirmación para estas fiestas. Felicito también a todos los que colaboran con el señor cura, especialmente al grupo de catequistas, evangelizadores y a todos los que colaboran para el bien espiritual de esta parroquia, sé que son muchos y que lo hacen con grande empeño y grande cariño a su fe».

Hablando de la fe en la familia, Mons. De Gasperín, dijo así: «Nosotros tenemos la fuerza y la presencia de Dios con nosotros, Dios está dispuesto a tendernos la mano, por ejemplo en la oración en la familia, hemos escuchado que se dice que la familia que reza unida, permanece unida, y es verdad, en la familia que ora unida, es una familia que le hace un espacio a Dios, que deja que Dios entre su hogar, en su casa, y cuando Dios entra en nuestro hogar, en nuestro corazón, en nuestra casa, en nuestra familia es un aliado nuestro. Dios está con nosotros, está con la familia, que lo invoca, que se encomienda a él, que reza unida. Por eso la fuerza de una familia es su fe. En la medida que nosotros incrementamos la fe, en esa media tenemos la fuerza de Dios con nosotros».

Terminó su homilía, pidiendo la bendición de Dios para todos: «Hermanos y hermanas: Que Dios los bendiga a todos ustedes, que el señor San Joaquín y señora santa Ana, vean por sus familias y que no le falte a nadie el sustento diario, el sustento de cada día para su familia, y que no le falte tampoco la santa Palabra de Dios y los Sacramentos de la Iglesia. Que así sea.»












INSCRIPCIONES EN LA ESCUELA BÍBLICA
La Pastoral Profética Diocesana invita a los religiosos y religiosas, a los agentes de pastoral y a todos los fieles en general a inscribirse para el Diplomado en estudios Bíblicos y el Diplomado en Catequética.
Recuerda que la formación hoy es una urgencia, si quieres ser verdadero cristiano y formar a verdaderos cristianos necesitas un conocimiento profundo de tu fe. Nuestros Obispos dijeron en Aparecida: «La vocación y el compromiso de ser hoy discípulos y misioneros de Jesucristo en América Latina y el Caribe, requieren una clara y decidida opción por la formación de los miembros de nuestras comunidades, en bien de todos los bautizados, cualquiera sea la función que desarrollen en la Iglesia». (DA 276) Aprovecha esta Institución que nuestro Obispo, preocupado por tu formación te ofrece. No la desaproveches.
INSCRIPCIONES: del 3 al 15 de agosto del 2009 de 10:00 a.m. a 13:00 p.m. y de 16:00 a 19:00 p.m.
HORARIO DE CLASES: Matutino martes y jueves de 10:00 a.m. a 13:00 p.m. Vespertino martes y jueves de 17:00 a 20:00 p.m. Sábados de 8:00 a.m. a 14:00 p.m.
INICIO DE CLASES: 15 de agosto COSTOS: Inscripción $150.00 Mensualidad $200.00
Para mayores informes comunícate a la Escuela Bíblica Diocesana «VERBUM VITAE»
Tel. (442) 2 23 76 09 Av. Corregidora #72 Nte. Centro.
Pbro. Lic. José Luis Salinas Ledesma
Director.









Actividades de nuestro señor Obispo

Fiesta de Santiago Apóstol, en Jalpan de Serra, Qro.
El sábado 25 de julio, la Parroquia de Santiago en Jalpan de Serra, llena de júbilo, celebró a su santo patrono el Apóstol Santiago. El Sr. Cura Pbro. Fidencio Servín León, recibió al Pastor Diocesano D. Mario De Gasperín, quien llegó a celebrar la Eucaristía, banquete de comunión de Dios con los hombres. Además confirió el sacramento de la Confirmación a niños y jóvenes que fueron catequizados para recibir el Espíritu Santo en la solemnidad de Santiago Apóstol.
Mons. De Gasperín, en su homilía, habló así de la Confirmación: «Nuestra fe se fortalezca... y que nosotros sepamos defenderla y dar testimonio de ella. Eso es precisamente la gracia que nos concede el sacramento de la Confirmación, así pues, por intercesión del Apóstol Santigo, pedimos que el Espíritu Santo que van a recibir estos jóvenes, fortalezca en ellos su fe católica y les dé la condición y la valentía para defender la fe. Cuando se conoce la fe se fortalece y se puede defender. El Espíritu Santo les dé sus dones de sabiduría y de fortaleza para que sean verdaderos y auténticos católicos».
También en la homilía predicó sobre la importancia de la unidad familiar: «El lugar más seguro para defenderse de cualquier adversidad es la familia, ahí, papá y mamá, unidos, unidos también con los hijos y los hermanos, unidos también a veces las personas mayores, en la familia, esa familia, hermosa, grande, unida sale adelante. Que todos colaboren para el bien de la familia, y que ninguno sea gravoso para los demás».
Terminó su homilía encomendándose al Apóstol Santiago: «Hermanas y hermanos, estamos reunidos en esta asamblea festiva, en esta asamblea de oración. La gracia que pedimos a señor Santiago, él sin duda nos la concederá: el ser fuertes en la fe, el saber dar testimonio de Jesucristo y así hacer presente la salvación de Dios en medio de nosotros».




Homilia de nuestro señor Obispo en la Fiesta de Santiago Apóstol, Patrono de la Diócesis de Querétaro

APÓSTOL SANTIAGO
Hermanas y hermanos:
1. Celebramos el martirio del apóstol Santiago, a manos del rey Herodes Agripa, quien lo mandó decapitar en Jerusalén. Viendo que esto agradaba a los judíos, pensó también matar Pedro, pero el Señor lo libró, porque tenía que cumplir una misión importante en Roma: Predicar el evangelio y morir en la cruz en el monte Vaticano, en la capital del Imperio. Santiago, en cambio, fue el primero en derramar su sangre por Cristo en Jerusalén. Roma construyó las vías imperiales para imponer su dominio y explotar a esos pueblos; los Apóstoles los recorren ahora a la inversa para llevar la libertad y la paz. Santiago fue también de los primeros llamados a seguir a Jesús junto con su hermano Juan, y con los otros hermanos Simón y Andrés. Suertes distintas pero todas igualadas por su fidelidad a Cristo sellada con el testimonio de su sangre. La sangre de los Apóstoles se suma a la sangre de Cristo y así se fortalece, crece y florece la santa Iglesia, a la que llamamos apostólica. Lo pedimos en la oración: «Fortalece, Señor, a tu Iglesia con el testimonio de su martirio y defiéndela con tu valiosa protección». En tiempos de cobardía es necesario implorar el don de fortaleza, y en tiempo de amenazas necesitamos de la divina protección. Hoy la imploramos de Dios para esta parroquia y para esta Ciudad que se ufana de llevar nombre y titular tan glorioso, el del Apóstol Santiago.

2. Los textos de la liturgia no están exentos de dramatismo: «Quienes participan del cáliz del Señor se convierten en amigos de Dios», dice la antífona de la comunión. Comeremos de un mismo Pan y beberemos de un mismo cáliz, por tanto participaremos de la muerte y de la pasión de Cristo, que es lo único que Jesús le promete a la madre de Santiago y Juan, para llegar a ser sus amigos. Ellos, llenos de entusiasmo, prometen beber el cáliz de Jesús, y así lo hicieron. Por eso los celebramos y nos amparamos bajo su protección, para tener la misma fortaleza que ellos y obtener el mismo triunfo.

3. El texto de la carta a los Corintios nos recuerda precisamente esa debilidad nuestra: «Llevamos ese tesoro -nuestra fe- en vasijas de barro, para que se vea que esa fuerza extraordinaria viene de Dios y no de nosotros mismos». Qué hermosa imagen pero, sobre todo, qué verdadera la comparación. El tesoro precioso de la fe, por el cual Cristo pagó el precio valioso de su sangre, lo llevamos en nuestro pobre cuerpo mortal, en nuestra alma inclinada al mal, en una pobre vasija de barro. A pesar de nuestra debilidad, el Señor nos lo confió. ¿Qué podremos más admirar, nuestra debilidad o la confianza del Señor? Su gracia siempre excede a nuestra miseria y debilidad. «Cuando soy débil, entonces soy fuerte», decía san Pablo. Por eso se gloriaba en su debilidad y así en él resplandecía la fuerza de Cristo.

4. A pesar de esta debilidad, en ese tesoro se esconde una fortaleza invencible: la fuerza de la resurrección de Cristo: «Llevamos siempre y en todas partes la muerte de Jesús en nuestro cuerpo, para que en ese mismo cuerpo se manifieste la vida de Jesús». Un cristiano es aquel que lleva siempre en su cuerpo los sufrimientos de la cruz de Cristo y, al mismo tiempo, en ese mismo cuerpo, la cruz va trasformando la muerte en vida, como sucedió en Jesús. Jesús reina desde a cruz. El grano de trigo, echado en el surco, muere; pero esta muerte es condición para que de allí brote la vida; así nos lo recuerda el verso de aleluya: «Yo los he elegido del mundo, dice el Señor, para que vayan y den fruto y su fruto permanezca». Jesús no quiere discípulos estériles, paralizados, sino portadores de vida.

5. Ese «vayan» nos está indicando la misión de todo discípulo del Señor. «Vayan» significa levantarse, ponerse en pie y caminar, entrar en movimiento y cumplir una misión. Todos en la Iglesia tenemos una vocación: «Yo los he elegido», hemos sido llamados, escogidos, no para estar sentados, sino para caminar, para ir y evangelizar. La Iglesia, la parroquia siempre debe estar en estado de misión, y cada feligrés debe convertirse en misionero: Todos discípulos misioneros de Jesucristo.

6. El temor que se experimenta al emprender un camino, se verá inmediatamente vencido y transformado en gozo, porque el fruto está asegurado: Los he elegido y los envío «para que den fruto y su fruto permanezca». Todo trabajo y esfuerzo que se hace en la Iglesia, produce necesariamente su fruto. Quizá no lo lleguemos a ver, pero el fruto es verdadero, real y permanente. Es promesa de Jesús, que ya anticipaba el hermoso salmo responsorial (Ps 125) que entonamos: «Los que siembran entre lágrimas, con gozo cosecharán», porque el Señor es capaz de hacer florecer el desierto y de cambiar el llanto en cántico de alegría: «Como cambian los ríos la suerte del desierto, cambia también ahora nuestra suerte, Señor», rezaba un desterrado; y añade confiado: «Entre gritos de júbilo cosecharán aquellos que siembran con dolor. Al ir, iban llorando, cargando la semilla; al regresar, vienen cantando, trayendo sus gavillas».

7. Hermanas y hermanos: Les deseo una siembra copiosa, el Señor nos la exige también dolorosa, para hacer florecer su parroquia mediante su trabajo pastoral y misionero, pero su promesa es consoladora: habrá una cosecha abundante de frutos sabrosos de vida cristiana. El apóstol Santiago es su garante y su intercesor. Amén.
+ Mario De Gasperín Gasperín
Obispo de Querétaro