viernes, 16 de marzo de 2012

Comunión, Órgano oficial de la Diócesis de Querétaro, 18 de Marzo de 2012 No. 735

Escucha
http://www.radiocristorey.com/
La radio oficial de la Visita del Papa a México

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Agenda

X ENCUENTRO
DIOCESANO DE
AGENTES DE
PASTORAL
FAMILIAR


I ENCUENTRO DIOCESANO DE ANIMADORES VOCACIONALES
PARROQUIALES

19 de marzo
Auditorio Juan Pablo II
Instituto Providencia
Calle de la Capilla No. 9
Pueblito, Corregidora, Qro.

Llevar alimentos para compartir
Cooperación $25°° por persona
8:00 a 15:00 hrs.

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18 de marzo
Día de la caridad

El 18 de marzo del 2012, IV Domingo de Cuaresma, celebraremos en nuestra Diócesis, el día de la caridad. Este año el Santo Padre Benedicto XVI, en su mensaje de cuaresma nos ha exhortado a crecer en las buenas obras y a competir en la caridad (cfr. Mensaje de Cuaresma, Benedicto XVI, 2012). La Iglesia Diocesana a través de sus organizaciones y de Cáritas en específico, debe hacer lo posible para poner a disposición los medios necesarios a fin de que los hambrientos sean saciados, los desnudos vestidos, los enfermos atendidos para que se recuperen, los prisioneros visitados, etc.

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El Papa Benedicto XVI estará en nuestro país del 23 al 26 de marzo de 2012. ¿A qué viene? El mismo lo dijo el 12 de diciembre de 2011, en la Basílica de San Pedro: «Tengo la intención de emprender un Viaje apostólico antes de la santa Pascua a México y Cuba, para proclamar allí la Palabra de Cristo y se afiance la convicción de que éste es un tiempo precioso para evangelizar con una fe recia, una esperanza viva y una caridad ardiente»

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Visita Pastoral del señor Obispo al Decanato de Santiago

El miércoles 7 de marzo inició la Visita Pastoral del Excmo. Sr. Obispo D. Faustino Armendáriz Jiménez al Decanato de la Santiago. Acompañado por el presbiterio de las 7 parroquias, una cuasi-parroquia y todos los templos del centro histórico de la ciudad de Querétaro que conforman este Decanato. El día 7 de marzo visitaron la Parroquia de la Divina Pastoral, la Parroquia del Sagrado Corazón (Santa Clara), Templo de San Agustín, la Santa Iglesia Catedral y la Parroquia de Santiago. El 8 de marzo continuaron en la Parroquia del Perpetuo Socorro, la Parroquia de San Isidro, el Seminario del Sagrado Corazón de los Padres Operarios, el Templo de San Francisco. El 9 de marzo inicio la visita en la Parroquia Jesús de Nazareth, para continuar en CISAV, después en la Parroquia de Misterio de Pentecostés, y terminar esta Visita Pastoral en la Cuasi Parroquia de María Puerta del Cielo.

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LA VOZ DE NUESTRO SEÑOR OBISPO
† Faustino Armendáriz Jiménez.
IX Obispo de Querétaro
Dejémonos purificar por Jesús
En nuestra comunidades eclesiales existen también estructuras que exigen la conversión de quienes las coordinamos, y el discernimiento para que las estructuras caducas que no responden a la eficiente transmisión de la fe sean renovadas.

Las apariciones de la virgen de Fátima nos revelan un contundente mensaje para toda la Iglesia, y la invitación va orientada a intensificar la oración y a tomar en serio el proceso de conversión de nuestra vida cristiana. El Papa Benedicto XVI quiso viajar como Peregrino al lugar de las apariciones el 11 de mayo de 2010, y en ese viaje el Santo Padre hace una relación donde liga el sufrimiento de la Iglesia con la profecía de Fátima: «Los sufrimientos vienen… del pecado que existe en la Iglesia…

Debemos reaprender precisamente lo esencial: la conversión, la plegaria, la penitencia y las virtudes teologales. Así respondemos, somos realistas al esperar que el mal siempre ataca, ataca desde el interior y desde el exterior, pero que también las fuerzas del bien están siempre presentes y que, al final, el Señor es mas fuerte que el mal, y Virgen es para nosotros la garantía visible de la bondad de Dios …»

Al leer el evangelio de este domingo encontramos la descripción de la valiente decisión de Jesús, que desde los inicios de su ministerio manifiesta con esta acción purificadora de tal manera que su deseo es que se destierre todo aquello que nada tiene que ver con lo sagrados, ya que se lastimaba la fe; los peregrinos eran robados por usureros sin escrúpulos y las ganancias iban a dar en los bolsillos de los especuladores y de algunas algunos «listos».

Jesús es el nuevo Templo, a través del cual todos nos podemos encontrar con Dios; por eso dirá: destruyan este templo y lo reconstruiré en tres días. Jesús tiene la autoridad para limpiar y purificar la casa del Padre, porque ha sido enviado para proclamar la Nueva Alianza entre Dios y el pueblo. Jesús limpia el templo como signo de la renovación que ha venido a realizar en el hombre; ha venido a los enfermos no a lo sanos. Nosotros, todos los que nos presentamos como creyentes en Cristo, somos templos del Espíritu Santo, y estamos orientados a guardar en nosotros la presencia misma del Espíritu Santo, a guardar en nuestro interior la presencia misma de Dios.

En nuestro templo, ¿que tiene que purificar Jesús?; o nos hemos acostumbrado a vivir con la mentira, las verdades a medias, la indiferencia al mas necesitado, el resentimiento y el odio, la dependencia excesiva de las cosas o la imagen social, etc.

La invitación es que esta cuaresma el Señor nos limpie por dentro, sin duda esto cuesta porque sanar llagas, heridas, siempre resulta doloroso. Esto conlleva intensificar nuestra oración personal delante del Sagrario, con el rezo del Santo Rosario, la Santa Misa también entre semana.

En nuestra comunidades eclesiales existen también estructuras que exigen la conversión de quienes las coordinamos, y el discernimiento para que las estructuras caducas que no responden a la eficiente transmisión de la fe sean renovadas.

En los evangelios de Mateo, Lucas y Marcos se nos describe como después de que Jesús realiza el gesto simbólico de la purificación del templo, las autoridades deciden aniquilarlo. El Señor no se detiene, porque la obra redentora y purificadora exige entrega con todas las consecuencias.

Nuestra oración por el Santo Padre Benedicto XVI, que próximamente visitara nuestro país, y tendremos al oportunidad de escuchar su palabra profética y valiente, que como en su viaje a Fátima, nos ayudara a seguir buscando camino de purificación, de conversión de los corazones, que posibiliten impulsar la misión permanente, de proclamar el evangelio.

¡Oremos por Su Santidad!

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SIGNOS VITALES
P. Gabino Tepetate Hernández.
gabino_th@hotmail.com
La fraternidad de los cristianos
La primera visita apostólica de su Santidad Benedicto XVI a nuestro país es una señal clara del aprecio y reconocimiento de los valores religiosos y cristianos del pueblo de México, pero también de preocupación e interés por fortalecer e impulsar este don precioso de la fe cristiana para que arraigue más profundamente en el corazón de las personas y de los pueblos, no sólo de México sino también desde México a toda América Latina y al Mundo.

En su brillante trayectoria al servicio de la Iglesia, Joseph Ratzinger, ahora Papa Benedicto XVI ha desempeñando altas responsabilidades al servicio de la Iglesia y se ha distinguido en su labor docente y en sus escritos de gran profundidad teológica. Temas como LA FRATERNIDAD DE LOS CRISTIANOS editado en 1960 título de un libro de Joseph Ratzinger contiene una conferencia que dictó en Viena en 1958 y que ha sido reeditado en el 2005 por la Editorial Sígueme Salamanca, que en opinión del Obispo Ricardo Blázquez quien hace la presentación afirma que es «un excelente servicio de clarificación y de animación espiritual».

Al leer, este pequeño libro (por su tamaño) puede uno darse cuenta de su gran aporte para abordar un aspecto fundamental de la vida cristiana como lo es la fraternidad que forma parte de nuestro lenguaje cotidiano. La fraternidad es el ideal y la identidad de la vida cristiana que el contenido de este libro nos ofrece para ayudarnos no sólo a conocer las distintas connotaciones históricas que ha tenido el concepto, sino sobre todo, precisar teológicamente el significado de la fraternidad entre los cristianos. Es un aporte que el mismo autor propone para animar a la reflexión sobre un tema tan importante como lo es la fraternidad cristiana.

Algunos elementos sobre el concepto teológico de la fraternidad cristiana es su vinculación profunda con el concepto de paternidad y filiación, en este aspecto es claramente demarcado de un lazo determinado por la sangre, por parentesco, de compatriota, de una solidaridad por una causa común, incluso de una mera fe religiosa compartida o como un fenómeno nacido de la propia naturaleza.

Este libro de La fraternidad cristiana sostiene que la paternidad de Dios confiere a la fraternidad cristiana su verdadera solidez y se percibe claramente cuando se avanza en el itinerario bíblico, camino para dilucidar el concepto de paternidad y de fraternidad, cuya centralidad es Cristo, Hijo único de Dios, en quien se da la realización concreta de ésta fraternidad distinta a otras fraternidades.

Sólo uno tiene el derecho de llamar a Dios mí Padre, todos los demás hombres tienen que decir en definitiva Padre nuestro. La oración del Padre Nuestro revela esta realidad teològica, sólo somos hijos y hermanos en su Hijo y sólo es Padre para mí en cuanto formo parte de la comunidad de sus hijos.

Aquí esta la raíz, el origen de la fraternidad cristiana, en la unión a Cristo a través de la fe y los sacramentos con sus exigencias éticas y sociales.

Esta mención al libro LA FRATERNIDAD CRISTIANA del Papa Benedicto XVI es sólo una invitación sugerente para retomar un tema significativo y de actualidad permanente para la comunidad humana y sobre todo para nuestra Iglesia cristiana católica, que reitero forma parte de nuestro ideal e identidad cristiana que hay que seguir profundizando.

«Que Dios los bendiga»

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OBSERVATORIO
por Jaime Septién
Misionero


El paso de monseñor Faustino Armendáriz Jiménez, como IV obispo de Matamoros, es descrito con entrañable cercanía, por la periodista Karina Elisama Conde Padrón, en el libro-homenaje cuyo nombre da santo y seña a la labor del hoy obispo de Querétaro: Misionero.

La participación en el Sínodo de la Palabra de Dios así como en la Asamblea General de la CELAM en Aparecida, confirmaron y relanzaron la propuesta misionera de don Faustino. Y el retrato de él, con profusión de fotografías, que ofrece Karina Conde no deja lugar a dudas. Se puede leer y contemplar la actividad –casi diríamos frenética—del obispo don Faustino en una ciudad, en un puerto, en una frontera, en una diócesis complicadísima por la violencia y el trasiego de drogas, migrantes, contrabando... Matamoros ha sido uno de los puntos rojos del panorama del México violento. Pero, como intitula Karina Conde uno de los capítulos del texto, “la violencia no frenó su obra misionera”. Antes al contrario, le descubrió un camino que, con valentía, hubo de recorrer, rezando por la paz, actuando por los más necesitados de consuelo, con los migrantes, los niños, los ancianos, los enfermos...

La lista de los sitios socorridos por don Faustino agrupa la Casa del Migrante, la Casa del Indigente, la Casa Hogar de Matamoros, la atención, en toda la diócesis, a comunidades dañadas por desastres naturales, la extensión de la ayuda social de la Iglesia a otras poblaciones como Reynosa y Río Bravo, generación de albergues, de comedores parroquiales, y, sobre todo, lo que el propio obispo llama “el visiteo”, casa por casa, para llevar hasta los ambientes más necesitados el Evangelio.

“Monseñor Faustino Armendáriz consumó un apostolado humano y cercano a la gente. Un obispo misionero que se entregó a la Diócesis de Matamoros sin reservas, donde se ordenó y aprendió a ser Obispo”, dice en su presentación Karina Conde. Y eso es lo que trata de mostrar el texto. Las fotografías son elocuentes. Me quedo con la de la página 56. Don Faustino, con la Biblia en la mano, hablando –en “el visiteo”—con un jovencito que sostiene un pan y un vaso de agua, bajo el dintel de una puerta de lámina. El obispo le dice algo con firmeza, mientras el jovencito se toca la frente, el pelo (quizá se rasca un poquito) con su mano derecho, en una actitud de comprensión recelosa: no es esto lo que yo espero de un obispo”, se estará diciendo a sí mismo. El pie de foto resume el libro: “Para monseñor Faustino Armendáriz, misionar no era un acto extraordinario, sino una obra que debe realizarse diariamente”.

La historia del obispo que hoy nos guía en Querétaro, narrada por una periodista de Matamoros, “donde aprendió a ser Obispo”.

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Visita Pastoral al Decanato de Santiago
Miércoles 7 – Viernes 9 de Marzo de 2012


Parroquia de la Divina Pastora




Parroquia de Santa Clara




Parroquia del Perpetuo Socorro




Parroquia Jesús de Nazareth




Parroquia de Pentecostés




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Visita Pastoral al Decanato de la Santiago
El 7 de marzo, nuestro señor Obispo D. Faustino Armendáriz Jiménez inició la Visita Pastoral al Decanato de la Santiago. Tercer Decanato que visita, en su Visita Pastoral a los Decanatos. El Sr. Decano Pbro. Lic., Filiberto Cruz Reyes, acompañado por sacerdotes diocesanos y religiosos de las parroquias y templos que conforman este decanato, acompañaron a nuestro señor Obispo.

Por la mañana del día 7 inició la Visita Pastoral en la Parroquia de la Divina Pastoral (Barrio de San Francisquito, Qro.); primero se llevó a cabo el desayuno y después la reunión con el Consejo parroquial y allí se llevó a cobo un encuentro fraterno con los sacerdotes del Decanato; con el método de panel de preguntas le presentaron la realidad global del Decanato, un momento de dialogo. Presentaron como desafíos el realizar proyectos a nivel decanal, conciencia decanal de comunión, sentido de partencia a la parroquia, los derechos humanos, la atención a los indigentes, impulsar el dialogo, incluir más a las mujeres a la vida religiosa en la actividad pastoral. Al medio día se trasladaron a la Parroquia del Sagrado Corazón (Santa Clara) Cada templo que forman la parroquia presento su Objetivo y Programa el trabajo se dividió en tres partes en la parroquia, en el Templo de San Agustín y en la santa Iglesia catedral. Por parte de Parroquia Pbro. Javier Martínez Osornio; Templo de Capuchinas el Pbro. Jorge López Colín; del Templo del Carmen Fray Jaime Antonio López Alvarado, OCD. Templo de San Antonio de Padua. Fray Octavio Luna Álvarez, OFM. Templo de Santa Rosa de Viterbo. Pbro. José Luis Salinas Ledesma. Templo de San José de Gracia. Pbro. José Ángel Mendoza Esqueda. Templo de Carmelitas. Pbro. José Hernández Pérez.

Antes de la comida se trasladaron al Convento de San Agustín el padre Fray Alejandro Torres Guzmán, OSA. Hizo la presentación de su Proyecto de Trabajo y se llevó a cabo la comida. Después de la comida en la Santa Iglesia Catedral presentación del resto de los trabajos de los templos de esta parroquia Templo de Santo Domingo, Fray José Luis Martínez Ramírez, OP. Templo de Teresitas, Pbro. Benjamín Vega Robles. Padres Salesianos. Pbro. Miguel Hernández.

Pasadas la cinco de la tarde, fueron recibidos con mucha alegría en Parroquia de Santiago. Al igual que en la parroquia del Sagrado Corazón, en el patio de la casa parroquial se realizó la presentación de trabajo parroquial con Consejo Parroquial de Pastoral y sacerdotes de los Templos de la Parroquia de Santiago. Cada templo presento su Objetivo y Programa, Parroquia de Santiago. Pbro. Lic. Gustavo Sanmartín Villegas. Del convento y Templo de la Santa Cruz de los Milagros y El Calvarito. Fray José Emilio Flores Lira, OFM. Templo de la Congregación. Pbro. Lic. Juan Manuel Pérez Romero. Templo de la Merced. Fray Jesús Luja Pérez, OM. En el Templo parroquial se llevó a cabo la Concelebración Eucarística y después de nuevo en la casa parroquial la Cena y Evaluación.

El segundo día, el 8 de marzo, en la en la Parroquia del Perpetuo Socorro (Col. Carretas), se tuvo la el desayuno. A las 9 de la mañana fue la recepción del Obispo y sacerdotes que lo acompañaban en el Templo parroquial se realizó el rezo de laudes y al terminar fue el traslado al Areópago Juan Pablo II donde fue la Presentación de trabajo parroquial con Consejo Parroquial de Pastoral de la Parroquia. Al medio día fueron recibidos en Parroquia de San Isidro, se hizo la presentación de trabajo parroquial con Consejo Parroquial de Pastoral de la Parroquia por parte del Pbro. Francisco Martín Alanís, CORC y del Templo Expiatorio por parte del Pbro. Prisciliano Hernández, CORC. En el Seminario del Sagrado Corazón, de los Padres Operarios se llevó a cabo la Comida y al final de la comida una breve presentación del Seminario. Cerca de las cinco de la tarde a regresaron a la Parroquia del Sagrado Corazón (Santa Clara) al Templo de San Francisco. El Vicario de Religiosas Pbro. Javier Martínez Osornio presento datos duros sobre las Religiosas. Después fue la presentación del trabajo del templo por Fray Sergio Hernández Moreno, OFM. Y también se presentó el trabajo de algunas Religiosas: Misioneras Marianas, Hermanas Marcelinas y Catequistas de María Santísima. En este Templo se llevó a cabo la Concelebración Eucarística la jornada del día termino con la cena y un pequeña revisión.

El tercer y último día, el 9 de marzo inició la visita en la Parroquia con el desayuno en parroquia de Jesús de Nazareth a las 9:00 de la mañana fue la recepción por los fieles del Consejo Parroquial y después de una breve oración la presentación de trabajo parroquial con Consejo Parroquial de Pastoral. En esta Visita Pastoral también fue recibido en el CISAV. (Centro de Investigación Social Avanzada) el Dr. Rodrigo Guerra López. Hizo la presentación del trabajo. Después de medio día fue la recepción en la Parroquia de Pentecostés. Aquí se realizó una breve oración sobre el significado de la Unción sacerdotal, después fue la presentación de trabajo parroquial con Consejo Parroquial de Pastoral y Sacerdotes de los Templos de la Parroquia de Pentecostés. Lo mismo hizo el Rector del Templo del Señor de la Misericordia hizo la presentación de su trabajo. En el atrio parroquia se llevó a cabo la Comida. A las cinco de la tarde fue la recepción en la Cuasi Parroquia de María Puerta del Cielo. Pbro. Antonio Gómez Elisea, CORC hizo la presentación de trabajo parroquial con Consejo Parroquial de Pastoral y por parte de los Padres del Opus Dei. Pbro. Dr. Jorge Chapa Urquidi hizo la presentación de su trabajo. Aquí se llevó a cabo la Concelebración Eucarística y esta Visita Pastoral al Decanato de Santiago termino un poco tarde con la cena y la revisión general.

Este Decanato cuenta con 7 parroquias, 1 Cuasi-Parroquia, tres casas de formación masculina (Operarios Diocesanos; Operarios del Reino de Cristo, franciscanos), atendido espiritualmente por 67 sacerdotes diocesanos y religiosos.

Nuestro señor obispo al igual que los Decanato ya visitados visito todas las parroquias del Decanato, acompañado por todos los sacerdotes que este Decanato llevan a cabo su misión pastoral, en todas las, parroquias se reunieron con el Consejo Parroquial, todos presentaron su Plan Parroquial de Parroquial, la realidad parroquia y lo que hace para responder a esos retos pastorales. En todas las parroquias todos los sacerdotes eran presentados. Al iniciar la visita nuestro señor obispo en el Templo Parroquial saludaba a todos los presentes y les informaba del objetivo de la Visita que es: CONOCER la realidad, el trabajo realizado, conocer es seguir adelante y decir y acentuar lo que no está bien; COMUNIÓN, impulsar la espiritualidad de comunión, buscar caminos de unidad, revisar y reorientar estructuras, entrar en un proceso de cambio, conversión. Y finalmente MISIÓN, procesos de formación que se trasforme en proceso.

Ya con los Consejos Parroquiales de pastoral, exhortaba a trabajaren una pastoral decididamente Misionera, no solo para conservar lo que se tiene. Misión intensiva conforme al Plan Diocesano de Pastoral. Insistía en el taller de programación, programar para evaluar, revisar los proyectos pastorales por lo menos cada dos años; incluir a todos, para tener una visión de todas las comunidades.

Pidió la elaboración de un proyecto decanal para la pastoral de indigentes y migrantes, les encargo de manera muy especial a los enfermos; mapa decanal; no prescindir de los medios de comunicación. Les recordó su necesidad para dar a conocer y compartir lo que se realiza, La próxima visita pastoral se realizara al Decanato de Guanajuato , del 24 al 27 de abril.

7 parroquias
1 Cuasi-parroquia
67 Sacerdotes Diocesanos y religiosos
173 Misas Dominicales
33 Parroquias Visitadas

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Prot. N° 19/2012
Circular Nº 11/2012
Asunto: Retiro de Preparación para la Renovación de las Promesas Sacerdotales y para la Pascua


A los hermanos Presbíteros religiosos y diocesanos
de la Diócesis de Querétaro:

Con el deseo de contribuir a la renovación interior de la vida de los sacerdotes y lograr un testimonio evangélico más intenso y decisivo, los convoco para el próximo retiro que nos preparará espiritualmente a renovar nuestro compromiso de consagración sacerdotal y para la celebración de la Pascua; esta experiencia la viviremos todos los sacerdotes, el 3 de abril del 2012 en el Seminario Conciliar.

Contemplemos con devoción el don del sacerdocio de Cristo para la Iglesia y para el mundo como un regalo de su corazón sacerdotal que invita a conmovernos y reconocer este maravilloso regalo de su bondad. Tengo siempre presente a todos los sacerdotes que con humildad reproducen diariamente las palabras y los gestos de Jesús, que guardan en su corazón los mismos sentimientos del Señor y que se esfuerzan en presentarlo a los demás fieles como el único tesoro por el que vale la pena dejarlo todo; me uno de corazón a sus deseos de santidad.

Queridos hermanos en el sacerdocio, pidamos al Señor Jesús la gracia de asumir en nuestra vida el propio ministerio, aspirando con humildad a la configuración con él para ser auténticos discípulos misioneros, viviendo gozosamente nuestra consagración.

Los confío a la intercesión de la Santísima Virgen María, pidiendo que suscite en el corazón de cada sacerdote de esta Diócesis, un generoso y renovado impulso de amor a Cristo y a la Iglesia.

En la Sede Episcopal de Santiago de Querétaro, a los 09 días del mes de marzo de 2012.

Fraternalmente en Cristo y María.

†  Faustino Armendáriz Jiménez
IX Obispo de Querétaro

Pbro. Dr. Jorge Hernández Nieto
Canciller

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Prot. N°. 15/2012
Circular N°. 10/2012
Asunto: Día de la Caridad


A los hermanos Presbíteros
a los miembros de la Vida Consagrada
y a todos los fieles de la Diócesis de Querétaro:

El amor es el servicio constante que la Iglesia presta para atender los sufrimientos y las necesidades, incluso materiales de los hombres. (cfr. Deus caritas est, 19). La parábola del Bueno Samaritano nos enseña que la caridad es ante todo la respuesta a una necesidad inmediata en una determinada situación. (cfr. Lc 10,25-37).

El próximo 18 de marzo del 2012, IV Domingo de Cuaresma, celebraremos en nuestra Diócesis, el día de la caridad. Este año el Santo Padre Benedicto XVI, en su mensaje de cuaresma nos ha exhortado a crecer en las buenas obras y a competir en la caridad (cfr. Mensaje de Cuaresma, Benedicto XVI, 2012). La Iglesia Diocesana a través de sus organizaciones y de Cáritas en específico, debe hacer lo posible para poner a disposición los medios necesarios a fin de que los hambrientos sean saciados, los desnudos vestidos, los enfermos atendidos para que se recuperen, los prisioneros visitados, etc.

El Pbro. José Enrique Ugalde Rodríguez, responsable de Caritas Diocesana, ha distribuido ya los sobres para la Colecta en favor de la Caridad. El fruto de la colecta, se entregará a la Economía Diocesana como es la costumbre.

Ruego a todos párrocos y rectores motiven a los fieles a participar generosamente en esta colecta a fin de satisfacer las necesidades inmediatas de nuestros hermanos más necesitados, agradezco su disponibilidad y generosidad. Los encomiendo a la protección e intercesión de la Santísima Virgen María.

En la Sede Episcopal de Santiago de Querétaro, a los 2 días del mes de marzo del 2012.

Fraternalmente en Cristo y María.
+ Faustino Armendáriz Jiménez
Obispo de Querétaro

Pbro. Dr. Jorge Hernández Nieto
Canciller

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Nuestro señor Obispo D. Faustino Armendáriz Jiménez, expidió el siguiente Decreto con el cual ha realizado el siguiente nombramiento:

Pbro. José Agustín Hernández Hernández, Asesor Espiritual Diocesano de las Comunidades Cristianas EAS.

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La Asociación de Peregrinos de la Diócesis de Querétaro al Tepeyac a través del Decanato de Santa Ana invitan a los hermanos peregrinos y fieles al tradicional sorteo diocesano de grupos para la 121 peregrinación a pie de la Diócesis de Querétaro al Tepeyac. Que se llevará a cabo el día domingo 18 de marzo del presente partiendo en peregrinación desde la agencia IV del ministerio publico ubicada en av. De las torres esq con av. Valle del Cimatario (subiendo por Av. Pasteur sur, pasando la aurrera express de la colonia azteca a mano izquierda). La cita es a las 8 am . Para llegar a las 9:30 am a la unidad deportiva reforma-lomas ubicada en la calle Antonio Carranza en la col. Reforma agraria donde se llevará a cabo todo el evento. La Eucaristía será a las 12 del día presidida por nuestro señor Obispo don Faustino Armendáriz Jiménez.
Mayor información en www.peregrinosdequeretaroaltepeyac.org

Atentamente:

Arturo Ortiz Moreno
Presidente del Decanato de Santa Ana

Pbro. Dr. Jorge Hernández Nieto
asesor espiritual decanal

Jaime Rojo Rojo
Presidente Seglar Diocesano

Pbro. Javier Bocanegra Morales
Director Espiritual Diocesano


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IV Domingo de Cuaresma – Ciclo B
Jesús, luz del mundo
Juan 3,14,21

Oración inicial
Shadai, Dios de la montaña,  que haces de nuestra frágil vida  la roca de tu morada, conduce nuestra mente  a golpear la roca del desierto,  para que brote el agua para nuestra sed.  La pobreza de nuestro sentir  nos cubra como un manto en la oscuridad de la noche  y abra el corazón, para acoger el eco del Silencio  y así el alba,  envolviéndonos en la nueva luz matutina,  nos lleve  con las cenizas consumadas por el fuego  de los pastores del Absoluto,  que han vigilado por nosotros junto al Divino Maestro,  al sabor de la santa memoria. 
1. Lectura
a) Texto:
14 Y como Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, 15 para que todo el que crea tenga en él la vida eterna. 16 Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna. 17 Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. 18 El que cree en él, no es juzgado; pero el que no cree, ya está juzgado, porque no ha creído en el nombre del Hijo unigénito de Dios. 19 Y el juicio está en que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. 20 Pues todo el que obra el mal aborrece la luz y no va a la luz, para que no sean censuradas sus obras. 21 Pero el que obra la verdad, va a la luz, para que quede de manifiesto que sus obras están hechas según Dios.»
 
b) Momento de silencio:
Dejamos que la voz del Verbo resuene en nosotros. 
 
2. Meditación
-Dios ha amado tanto al mundo…: cuántos juicios y prejuicios sobre un Dios lejano e insensible. ¿No será quizás que le atribuimos a Él lo que son por el contrario nuestras responsabilidades?
- La luz ha venido al mundo, pero los hombres han preferido las tinieblas: quien se ilusiona pensando que no es hombre y vive por Dios, no puede escoger la luz porque la ilusión desaparecería. ¿Cuántas tinieblas rodean mis jornadas?
- Quien obra la verdad viene a la luz. No tiene temor de mostrarse quien obra por aquello que es. No se le pide al hombre ser infalible. Sencillamente que sea hombre. ¿Somos capaces de vivir nuestra debilidad como lugar de encuentro y de apertura a Dios y a los otros, deseosos como yo de trabajar fielmente en su espacio y en su tempo?
 
b) Clave de lectura:
vv. 14-15. Y como Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre para que todo el que crea tenga en Él la vida eterna. Para los hijos de Israel, mordidos por serpientes venenosas en el desierto, Moisés ofreció una posibilidad de salvarse fijando la vista en una serpiente de bronce. Si el hombre consigue levantar la cabeza y mirar en alto, Dios prepara para él una alternativa. No obliga, está allí, a disposición. El misterio de la libertad humana es de los más digno de amor que Dios ha podido inventar. Escogiendo una mirada, un encontrarse, una nueva oportunidad… el Hijo del hombre en el desierto del mundo será levantado sobre la cruz como signo de salvación para todos aquéllos que sientan la necesidad de continuar viviendo y no se abandonen a mordidas venenosas de preferencias erróneas. Cristo está allí: maldito para el que no tiene fe, bendito para el que cree. Un fruto que escoger, colgado del leño de la vida. También nosotros como los israelitas en el desierto hemos sido «mordidos» por la serpiente en el Edén y tenemos necesidad de mirar a la serpiente de bronce levantada sobre el madero para no morir: «Quien cree en Él tiene vida eterna».
 
v.16. Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna. El amor con que Dios nos ama es un amor de predilección, un amor tangible, un amor que habla… ¿Podía venir directamente el Padre? Sí, ¿pero no es más grande el amor de un padre que da a su hijo? Toda madre pudiendo escoger, prefiere morir ella antes que ver morir a un hijo. ¡Dios nos ha amado hasta tal punto de ver morir a su Hijo!
 
v. 17. Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. Un Dios capaz de juicio perfecto manda al Hijo, no para juzgar, sino para ser lugar de salvación. Verdaderamente es necesario suspender todo pensamiento y sentirse anonadado frente a tanto amor. Sólo quien ama puede «juzgar» , esto es, «salvar». Él conoce la debilidad del corazón humano y sabe que su imagen ennegrecida tiene la posibilidad de volver a ser nítida, no hay necesidad de rehacerla. La lógica de la vida no conoce la muerte: Dios que es vida no puede destruir lo que Él mismo ha querido crear, se destruiría en algún modo a sí mismo.

v.18. El que cree en Él, no es juzgado; pero el que no cree, ya está juzgado, porque no ha creído en el nombre del Hijo unigénito de Dios. La fe es la discriminante de toda existencia. No creer en el nombre del unigénito: ésta es ya una condena, porque se excluye del amor quien no acoge al amor.
 
vv. 19-20. Y el juicio está en que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. Pues todo el que obra el mal aborrece la luz y no va a la luz, para que no sean censuradas sus obras. El único juicio que abarca a toda la humanidad es la llamada a vivir en la luz. Cuando el sol sale, nadie puede substraerse a sus rayos…y así también los hombres. Cuando Cristo nace, ninguno puede substraerse a esta luz que todo lo inunda. Pero los hombres se han construidos casas para poder escapar de la luz del Amor que se expande por doquier, casas de egoísmo, casas de oportunidad. Han perforado túneles y escondrijos para continuar libremente haciendo sus obras. ¿Puede una obra falta de luz dar la vida? La luz de la existencia tiene una sola fuente: Dios. Quien se aparta de la luz, muere.
 
v. 21. Pero el que obra la verdad, va a la luz, para que quede de manifiesto que sus obras están hechas según Dios. Todo lo que cae bajo los rayos del amor eterno, se viste de luz, como sucede en la naturaleza. Parece que todo sonríe cuando sale el sol. Y las cosas que durante el día son familiares y bellas, de noche toman formas que infunden temor por el solo hecho de no ser visibles. El sol no cambia la forma, pero la exalta en su belleza, Quien vive la verdad de sí mismo y acoge su fragilidad como parámetros de su ser hombre, no tiene temor de la luz, porque no tiene nada que esconder. Sabe que como criatura trabaja con la lógica del límite, pero esto no disminuye la grandeza de su obrar, porque su vida es un todo con la verdad eterna.
 
c) Reflexión:
El jardín se convierte en desierto para el hombre que se aleja de Dios. Y en el desierto de su libertad sin límites el hombre encuentra una vez más las mordidas venenosas de la serpiente. Dios sin embargo no abandona a sus hijos, y cuando se alejan de Él los sigue, pronto para acudir en sus necesidades. Una serpiente símbolo de curación se eleva cada vez que el veneno infesta la vida en el hombre, Cristo Señor. Si el hombre prefiere mirar a tierra y estar en el desierto de su «me basto solo», Dios de todos modos se ofrece a su mirada en el solo modo en el que el hombre lo reconoce: como una serpiente. Cristo se ha hecho pecado, maldito, para salvar su imagen, con tal de no apagar la vida humana. La condena no pertenece a Dios, sino la escoge el hombre. Puedo no vivir junto al calor, libérrimo de hacerlo. Pero esto conlleva el tener que procurarme otra clase de calor, si me quiero calentar. Con el riesgo de pasar frío, enfermedad, fatiga…. la libertad por Dios tiene un precio de condena. Es de personas poco inteligentes, no aprovecharse de un bien regalado, es sencillamente de tontos no acoger lo que mejor sea para no sentirse deudores. En el ámbito del amor, la palabra «deuda» no existe porque la gratuidad es el único vocabulario consultable. Y con la palabra gratuidad explota la luz: todo se convierte en posibilidad y ocasión. Obras hechas en las tinieblas o más bien obras hechas en Dios: los simulacros de fango del débil resplandor de piedras falsas son juguetes peligrosos para todos; mejor frecuentar las aulas plenas de sol de un discipulado nunca terminado. Al menos la vida se acrecienta y el gozo cubre de belleza toda cosa…
 
3. Oración
Salmo 35
El pecado es un oráculo para el impío que le habla en el fondo de su corazón; no tiene temor de Dios ni aun estando en su presencia. Se halaga tanto a sí mismo que no descubre y detesta su culpa; sólo dice maldades y engaños, renunció a ser sensato, a hacer el bien. -Tu amor, Yahvé, llega al cielo, tu fidelidad alcanza las nubes; tu justicia, como las altas montañas, tus sentencias, profundas como el océano. Tú proteges a hombres y animales, ¡qué admirable es tu amor, oh Dios! Por eso los seres humanos se cobijan a la sombra de tus alas; se sacian con las provisiones de tu casa, en el torrente de tus delicias los abrevas; pues en ti está la fuente de la vida, y en tu luz vemos la luz. No dejes de amar a los que te conocen, de ser fiel con los hombres sinceros. ¡Que el pie del orgulloso no me pise, ni me avente la mano del impío! Ved cómo caen los malhechores, abatidos, no pueden levantarse.
 
4. Contemplación
Cuando el santo temor me abandona, Señor, siento en mi corazón el pecado que habla. Son los momentos de la ilusión, momentos en los que voy a buscar mis culpas y todo esto inútilmente, porque no he comprendido, que sólo cumpliendo el bien, las falaces e inicuas palabras del mal se extinguen. Es una atracción la obstinación en el mal, como si me diese más brillo, honor, más valor. Cuando caigo en la cuenta que es inmenso lo que Tú me das para vivir, entonces percibo los abismos de tu fidelidad y veo como tu salvación no conoce confín; todo lo inunda y porta consigo; a mí criatura hecha a tu imagen y todo lo que para mí has creado y a quien yo he dado nombre. En verdad tu gracia es preciosa. En tu casa manda la abundancia de la protección y discurre como el agua la delicia. Si me pongo tus ojos entonces todo es luz, Señor, Y nada es ya difícil porque mi corazón, purificado de la tentación de ser Dios en tu lugar, me dice que lo seré conmigo. Rivalidad, competición hostilidad… desaparecen de frente a tu propuesta de participar en tu vida divina. Dios contigo. Tu amor como linfa que camina por las entrañas de mi humanidad hasta que encuentre mis orígenes: en tu Nombre.

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La Congregación de Clérigos Seculares
La fe y la devoción a la Virgen Morena se debió a un gran hombre, al padre LUCAS GUERRERO Y RODEA. En el año de 1659, este piadoso sacerdote había adquirido un terreno jamás abierto por reja del arado, y en una pequeña parte él había sembrado trigo con esperanza de recoger a su tiempo el preciado fruto. Muchos conocedores de campo tenían por imposible la cosecha, por ser aquel terreno erizo y estéril, pronósticos tan fatales y bien autorizados, llevaron al corazón del padre Guerrero al desaliento y la congoja o por los temores de una pérdida segura. En esta situación de desanimo imploró el auxilio de su Madre Santísima de Guadalupe, y puso bajo su poderosa protección la parcela, diciendo con todas las fuerzas de su alma: «¡Ea, Virgen María Santísima de Guadalupe! fuera de diezmo y de partido, te daré el tercio de lo que me quede».

La divina señora parece que aceptó gustosa la promesa de su siervo, pues la pequeña sementera rindió a su dueño la cosecha deseada. Realizada la venta de trigo, y hechas escrupulosamente las particiones, tocaron a la Santísima Virgen de Guadalupe quince pesos, los cuales fueron apartados para enviarlos al Santuario el Tepeyac. Más sabedor el Pbro. D. Francisco de Lepe, le propuso como cosa mejor emplear los quince pesos en comprar una copia del milagroso original de Nuestra Señora de Guadalupe; a fin de que en esta ciudad se le rindiese culto. Los quince pesos rendidos por la siembra fueron dedicados a su adquisición. Sin pérdida de tiempo el mismo padre Guerrero y Rodea se puso en camino para la ciudad de México en busca de una buena pintura de la Santa imagen. No son numerosas las Imágenes de Nuestra Señora de Guadalupe que fueron pintadas durante el siglo XVII.

Muy de su agrado encontró el P. Lucas Guerrero una imagen y lleno de gozo regresó trayéndola consigo a la ciudad de Querétaro. Llegada pues, la Santa Imagen a esta ciudad en 1659, determinó el Padre Lucas Guerrero, exponerla públicamente en alguna Iglesia, y para esto eligió la de Hospital Real de la Purísima Concepción (san José de Gracia). Colocó la Imagen de Nuestra Señora de Guadalupe en un humilde altar de la iglesia. Así, sin esplendor, con pobreza tan grande, rodeado de unos cuantos pero fervorosos corazones, fue entronizada en la ciudad de Querétaro. Iniciando así la devoción guadalupana en Querétaro. No tardaron en agruparse en torno al P. Lucas Guerrero piadosos sacerdotes residentes en la ciudad y los primeros devotos. Este amor y veneración a la Virgen Morena pronto sé vió sometida a duras pruebas.

La fidelidad a la Madre de Dios y la fortaleza ejemplar en las adversidades de estos primeros devotos fue premiada por Dios. Cesó la hostilidad y cada día iba siendo mayor el número de nuevos devotos.
Después de diez años de haberse consagrado al servicio de la Sma. Virgen de Guadalupe en la Inglecita del Hospital Real de la Inmaculada Concepción, el P. Lucas Guerrero y los que se habían asociado, bajo el amparo de la divina Señora, habían ido perfeccionándose en la virtud, buscaban de practicar mejor, más meritoriamente y en más dilatado campo las virtudes, así para la propia santificación como para el mayor provecho espiritual de los fieles. Llegaron a convenir constituirse en CONGREGACIÓN sacerdotal destinada únicamente al culto de María Santísima de Guadalupe. Pronto se formaron las Constituciones, solicitaron la licencia para fundar canónicamente en la ciudad de Querétaro tal institución, bajo el nombre de Congregación de Clérigos Seculares de Santa María de Guadalupe. El P. Lucas Guerrero gestionó personalmente con el M.I. Provisor y Vicario General de la Arquidiócesis de México, el queretano Antonio de Cárdenas y Salazar el cual dió licencia canónica para que, cumplidas ciertas condiciones, se fundara dicha Congregación. EL 10 DE ENERO DE 1669, quedó Canónicamente FUNDADA, y oficialmente RECONOCIDA por la Autoridad Eclesiástica, «LA CONGREGACIÓN DE CLÉRIGOS SECULARES DE SANTA MARÍA DE GUADALUPE». En la Ciudad de Querétaro.

El 5 de septiembre de 1691 el Papa SS. INOCENCIO XII, expidió la Bula «Pietatis et Charitatis oper» por la cual también S. Santidad aprobó la Congregación y la confirmó in perpétuum. Erigida ya canónicamente la Congregación necesitaba de Iglesia propia. La Congregación no contaba con recursos para emprender la construcción de una Iglesia. En el año de 1671 fue comprado el predio donde hoy se ve el templo de la Sma. Virgen de Guadalupe. Gestionadas las licencias para edificar la Iglesia, en febrero de 1674 se pudo poner la primera piedra de la primitiva capilla. El 3 de mayo de 1647, se bendijo ritualmente, aquel modestísimo Santuario, el tercero levantado en honor de la Sma. Virgen de Guadalupe en nuestra patria.

Tiempo después los padres congregantes determinaron emprender la construcción de una nueva Iglesia. Siendo el alma de esta empresa el incansable Padre Lucas Guerrero y Rodea. El 1 de junio de 1675 se bendijo y colocó la primera piedra. Contando con la ayuda de los insignes bienhechores, el Padre Nicolás y Juan Caballero y Osio, este último ordenado sacerdote en 1677. El 11 de mayo de 1680 el padre Juan Caballero y Osio, bendijo solemnemente el nuevo Santuario. La decoración del Templo, la abundante y rica dotación de ornamentos, vasos sagrados y de cuantos objetos para el culto se estrenaron en la Dedicación, así como los cuantiosos gastos que se hicieron, fueron a expensas del magnífico Padre JUAN CABALLERO Y OSIO.

Dios concedió al Padre Lucas Guerrero y Rodea ver floreciente a su amadísima Congregación, con Iglesia propia, abastecida ricamente con todo lo necesario para el culto divino. Con numerosos congregantes, hijos suyos. Dios también concedió dejar muy extendida y arraigada en los corazones queretanos la devoción a MARÍA SANTÍSIMA DE GUADALUPE. Al estrenarse el Templo de la Congregación, sé coloso en el retablo del Altar Mayor, una segunda Imagen de María Santísima de Guadalupe pintada por Baltazar Echeve.

La bellísima Imagen que hoy veneramos es la tercera; pintó para sí el insigne don Miguel Cabrera, quien la regalo al Excmo. Sr. Arzobispo de México don Manuel Rubio y Salinas. Después pasó a propiedad del Sr. Bernardo Pardo y este en 1778, la intercambió con el Padre don Antonio Lomas Chávez. Prefecto de la Congregación y desde entonces la veneramos en su Templo.

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Lucas Guerrero y Rodea.
Nació en la ciudad de Querétaro en el año de 1624. Sus Padres fueron D. Lucas Guerrero y Doña Francisca Rodea. Llamado por Dios al estado eclesiástico, fue ordenado sacerdote; la iglesia metropolitana de México utilizó sus excelentes cualidades y aptitudes, nombrándolo colector y administrador de diezmos en las jurisdicciones de Querétaro, Huichapan y San Juan del Río. El Padre Lucas Guerrero Y Rodea, murió santamente en la ciudad de Querétaro el 17 de mayo de 1685, fue sepultado en la cripta de su querido templo.

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Cápsula de Liturgia
CONGREGACIÓN PARA EL CULTO DIVINO Y LA DISCIPLINA DE LOS SACRAMENTOS DIRECTORIO SOBRE LA PIEDAD POPULAR Y LA LITURGIA PRINCIPIOS Y ORIENTACIONES CIUDAD DEL VATICANO 2002.


Capítulo IV
AÑO LITÚRGICO Y PIEDAD POPULAR

135. Los textos para el Vía Crucis son innumerables. Han sido compuestos por pastores movidos por una sincera estima a este ejercicio de piedad y convencidos de su eficacia espiritual; otras veces tienen por autores a fieles laicos, eminentes por la santidad de vida, doctrina o talento literario.

La selección del texto, teniendo presente las eventuales indicaciones del Obispo, se deberá hacer considerando sobre todo las características de los que participan en el ejercicio de piedad y el principio pastoral de combinar sabiamente la continuidad y la innovación. En todo caso, serán preferibles los textos en los que resuenen, correctamente aplicadas, las palabras de la Biblia, y que estén escritos con un estilo digno y sencillo.

Un desarrollo inteligente del Vía Crucis, en el que se alternan de manera equilibrada: palabra, silencio, canto, movimiento procesional y parada meditativa, contribuye a que se obtengan los frutos espirituales de este ejercicio de piedad.
El «Vía Matris»

136. Así como en el plan salvífico de Dios (cfr. Lc 2,34-35) están asociados Cristo crucificado y la Virgen dolorosa, también los están en la Liturgia y en la piedad popular.

Como Cristo es el «hombre de dolores» (Is 53,3), por medio del cual se ha complacido Dios en «reconciliar consigo todos los seres: los del cielo y los de la tierra, haciendo la paz por la sangre de su cruz» (Col 1,20), así María es la «mujer del dolor», que Dios ha querido asociar a su Hijo, como madre y partícipe de su Pasión (socia Passionis).

Desde los días de la infancia de Cristo, toda la vida de la Virgen, participando del rechazo de que era objeto su Hijo, transcurrió bajo el signo de la espada (cfr. Lc 2,35). Sin embargo, la piedad del pueblo cristiano ha señalado siete episodios principales en la vida dolorosa de la Madre y los ha considerado como los «siete dolores» de Santa María Virgen.

Así, según el modelo del Vía Crucis, ha nacido el ejercicio de piedad del Vía Matris dolorosae, o simplemente Vía Matris, aprobado también por la Sede Apostólica. Desde el siglo XVI hay ya formas incipientes del Vía Matris, pero en su forma actual no es anterior al siglo XIX. La intuición fundamental es considerar toda la vida de la Virgen, desde el anuncio profético de Simeón (cfr. Lc 2,34-35) hasta la muerte y sepultura del Hijo, como un camino de fe y de dolor: camino articulado en siete «estaciones», que corresponden a los «siete dolores» de la Madre del Señor.
137. El ejercicio de piedad del Vía Matris se armoniza bien con algunos temas propios del itinerario cuaresmal. Como el dolor de la Virgen tiene su causa en el rechazo que Cristo ha sufrido por parte de los hombres, el Vía Matris remite constante y necesariamente al misterio de Cristo, siervo sufriente del Señor (cfr. Is 52,13-53,12), rechazado por su propio pueblo (cfr. Jn 1,11; Lc 2,1-7; 2,34-35; 4,28-29; Mt 26,47-56; Hech 12,1-5). Y remite también al misterio de la Iglesia: las estaciones del Vía Matris son etapas del camino de fe y dolor en el que la Virgen ha precedido a la Iglesia y que esta deberá recorrer hasta el final de los tiempos.

El Vía Matris tiene como máxima expresión la «Piedad», tema inagotable del arte cristiano desde la Edad Media.

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Los Siete Dolores de María Santísima
El Capulín, Mpio. de San José Iturbide, Gto.

Cuando llegué al Capulín, Gto., eran las 6 de la mañana con 10 minutos. No había terminado de amanecer, se sentía un frío que no llegaba a ser helado, propio de las altitudes de más de 2000 metros sobre el nivel del mar, en esta época, en la que el año vive en los últimos días del invierno, y en los que ya se siente una pre-primavera con el clima naturalmente inestable, propio de marzo, pero por tiempos, fresco por las mañanas y agradable todo el día.
Después de dar una vuelta caminando por el andén, alrededor de la plaza, estuve contemplando la portada del templo parroquial. Se trata de un estilo decididamente neoclásico con algunos detalles del gótico pero que en su conjunto nos ofrece una armonía sorprendente que desemboca en lo magnífico. Su capacidad es de 1000 personas de las cuales 600 estarían sentadas y 400 de pie. En la parte alta de la portada protegido por un arco ojival se encuentra un vitral que representa un corazón femenino traspasado por siete espadas, que significan, cada uno de los 7 dolores de María Santísima. Tal es el título oficial de esta parroquia. Según me informaron algunas personas a las que les pregunté, entre ellos al señor cura Pbro. Alejandro Ledezma Ramírez, ¿cuáles fueron los 7 dolores de la Virgen Santísima?, esto fue lo que me dijeron: la profecía de Simeón, la huida a Egipto, el Niño perdido en el templo, María se encuentra con Jesús en el camino al Calvario, Jesús muere en la cruz, María recibe el Cuerpo de Jesús al ser bajado de La cruz, y Jesús es sepultado.
Existe una pequeña placa en la que se informa el año en el que inició la obra del templo y en el que terminó: desde 1899 hasta 1911.
Cuantos recuerdos se revivieron en mí al llegar a este clásico pueblo del semidesierto guanajuatense, donde hace los 35 años hacía apostolado siendo yo seminarista, allá cuando visitaba cada semana al padre Jaime Reséndiz. Ahora es algo diferente, pero sin demasiados cambios, porque en realidad, El Capulín sigue siendo el mismo, aunque hayan pasado ya las cuatro décadas de que tuve el privilegio de estar aquí y gozar de la amistad de muchas personas sencillas y sin doblez que aquí habitan.
Entré en el templo y me dirigí a la sacristía, allí encontré al padre vicario, el presbítero Jonathan Basaldúa Vázquez quien me invitó a concelebrar y me pidió que presidiera con el argumento de que, era pastoralmente conveniente que las personas escucharan una voz diferente. No opuse resistencia. Había un buen número de asistentes. El organista Francisco Vega Robles lograba que la comunidad participara en los cantos. Además de la comunidad, también participaron en la celebración, 4 religiosas que en este pueblo viven y colaboran en las diferentes actividades de la pastoral parroquial; ellas pertenecen a la congregación de Catequistas de María Santísima. Después de la celebración nos fuimos a desayunar allí fue donde saludé al padre Alejandro y donde platicamos extensamente. La noche anterior los dos padres llegaron de un viaje que realizaron con casi 150 personas de la parroquia, algo así como un paseo comunitario parroquial, visitando el santuario de Atocha en Fresnillo, la basílica de San Juan de los Lagos, Jalisco; y el Santuario de Cristo Rey en el cerro del Cubilete. Estos paseos comunitarios son eventos que deberían existir en todas las parroquias, ya que son espacios y momentos en los que se convive con las personas y en los cuales se pueden transmitir no solo conceptos sino sobre todo vivencias y testimonios, en el contexto en el que regularmente no se vive, pero que permite valorarnos desde otros ángulos. Esa misma mañana, los padres salieron hacia Atarjea, Gto., lugar donde tendrían la reunión de decanato de marzo, que por ser tan lejos, como es costumbre de ese decanato de la Sierra de Guanajuato, dura 2 días.
El Capulín es una de las 3 parroquias en la Diócesis que genera más vocaciones a la vida sacerdotal y religiosa. El padre Alejandro nos comparte que actualmente hay 3 seminaristas en el Seminario Mayor, o sea en los últimos 7 años de la formación sacerdotal, y 4 en la etapa del Seminario Menor, o sea en la preparatoria. Según sabemos del actual presbiterio de la diócesis de Querétaro, 16 sacerdotes nacieron en la parroquia del Capulín, entre ellos el actual párroco. Le pregunté al padre Alejandro acerca del «dicho evangélico» de que «nadie es profeta en su tierra», lo que me que contestó fue que, él mismo le dijo al señor obispo eso, cuando lo envió al Capulín, a lo que Don Mario De Gasperín le dijo: «Yo a usted no lo envío como profeta, sino como párroco».
Uno de los sacerdotes que dejaron huella fue el padre Juan José Plaza, quien impulsó decididamente la construcción del magnífico templo parroquial. Se sabe que no llegó a verlo terminado ya que a los dos años de que se inició la obra, murió a consecuencia de un accidente de carreta en la cual visitaba a los enfermos.
En la parte exterior del salón de reuniones encontramos un busto de otro sacerdote insigne: el padre Porfirio Vega, quien estuvo a cargo de la parroquia del Capulín nada menos que 32 años, 29 de Vicario Fijo y 3 como Párroco, siendo él en quien recayó ese cargo por primera vez en El Capulín. Murió el 12 de diciembre de 1965. La parroquia había iniciado su caminar como parroquia el 12 de enero de 1962. Según nos platica el padre Alejandro, el padre Porfirio vega fue quien formó la comunidad parroquial por su arduo trabajo pastoral. Y ese es el motivo por el que el pueblo, con gran cariño le rindió ese homenaje tan especial que erigirle un monumento. El padre Alejandro tiene ya 14 años en el Capulín como párroco, y él mismo dice que en todo se a apegado al Plan Diocesano de pastoral. Muestra de ellos es el especial esmero en formar todas las comisiones y dimensiones de la pastoral. ¡QUE DIOS NOS CONSERVE ALEGRES EN SU SANTO SERVICIO!

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